viernes, 31 de enero de 2025

CÉLINE Y JULIE VAN EN BARCO

 


Céline (Juliet Berto), una maga, y Julie (Dominique Labourier), una bibliotecaria, se conocen en Montmartre y terminan compartiendo el mismo piso y suplantándose sus identidades por pura diversión. Gracias a un caramelo mágico, se convierten en espectadoras, y luego en participantes, de una historia que se desarrolla en una gran mansión aislada donde viven un viudo, su hija de 8 años y dos mujeres.


Habrá más de uno al que esta película de Jacques Rivette le parezca una soberana pérdida de tiempo de más de tres horas de duración, con idas y venidas de las dos protagonistas y escenas que se repiten una y otra vez en la misteriosa mansión del 7 bis de la rue du Nadir-aux-Pommes, aderezadas con insustanciales diálogos.


Pero quien consiga entrar en el juego de Rivette, va a descubrir una propuesta diferente de contar una historia en el celuloide, una especie de cuento que nos devuelve a la infancia cuando todo era posible gracias a la imaginación. Un juego de espejos que guarda semejanzas con la Alicia de Lewis Carroll, en el que realidad e imaginación se entremezclan constantemente. 
A medida que el film avanza y sobre todo al final, vemos que el realizador francés nos adentra en una película que no tiene final y cuyas situaciones se van a repetir de manera indefinida. Una película exuberante que es como un paseo por los laberintos de la imaginación.





jueves, 30 de enero de 2025

MIS PEQUEÑOS AMORES

 


En un pequeño pueblo meridional francés, Daniel (Martin Loeb), un muchacho que está entrando en la adolescencia, vive feliz con su abuela. Pero se ha de mudar a Narbona con su madre y el novio de ella, José Ramos (Dionys Mascolo), un trabajador agrícola español. A Daniel le gustaría seguir estudiando, pero su madre, una costurera que vive en un pequeño apartamento, no puede permitirse pagar sus estudios y lo envía a trabajar como aprendiz en un taller de reparación de ciclomotores. Daniel pasa el tiempo en el taller y aprende sobre las chicas gracias a los otros chicos del barrio. Cuando vuelve a visitar a su abuela el año siguiente, es evidente que ha crecido más rápido que sus viejos amigos.


La película muestra los pequeños acontecimientos en la vida del protagonista, tanto en en el pueblo, como en la ciudad de provincias.


Aunque es cierto que la película de Jean Eustache gira en torno al despertar sexual de la adolescencia, algo que hace sin demasiado morbo y sin escenas que pudiéramos considerar escabrosas y menos vistas con los ojos de hoy, la película es más un relato costumbrista de una cierta realidad social de la época que retrata, con jóvenes que empiezan a trabajar de manera precaria, como aprendices, se decía, cuando muchas veces lo que hacían era manejar la escoba, realizar recados o una mera labor de vigilancia cuando el dueño se ausentaba del negocio y todo a cambio de las propinas que pudieran recibir. 
El film nos ofrece una visión de lo que era la vida en las capitales de provincia, con algunas situaciones no tan distintas de lo que se podía ver en España, como esos paseos por el boulevard o la calle principal que servían como lugar de encuentro y chismorreo, para lucir palmito o para intercambiar guiños entre los más jóvenes. Vemos a los niños jugando en la calle o a los jovenzuelos en la terraza del bar alrededor de una cerveza y fumando cuando apenas tienen edad para afeitarse. 
Eustache rinde su particular homenaje al cine, lugar propicio para pequeños e inocentes escarceos amorosos como el que vive el protagonista en el "gallinero" de la sala de proyecciones mientras en pantalla vemos imágenes de "Pandora y el holandés errante", la película rodada en Tossa de Mar y protagonizada por Ava Gardner y James Mason.
Tiempos recientes, pero que parecen muy, muy lejanos, cuando en cualquier ciudad mediana o pequeña había dos o tres salas de cine y hoy, incluso en alguna capital, se han quedado sin ninguna.




miércoles, 29 de enero de 2025

LA MAMÁ Y LA PUTA

 


Alexandre (Jean-Pierre Léaud) es un joven burgués cínico y egoísta que vive en París. Se encuentra en un fase nihilista de su existencia: no estudia, no trabaja y apenas se interesa por los libros o por la música. Lo único que le interesa son las mujeres y, además, vive a su costa. Poco a poco va formando con Marie (Bernadette Lafont) y Veronique (Françoise Lebrun) un atípico 'menage à trois', que, para él, es absolutamente satisfactorio porque representa un equilibrio entre lo sexual, lo maternal y lo material. Al mismo tiempo, es capaz de mantenerse al margen de los sentimientos de frustración o malestar que su conducta pueda provocar en sus amantes.


Tras la Nouvelle Vague, la revolución sexual y las revueltas de mayo de 1968, llegó la obra magna de Jean Eustache, casi venerada por algunos críticos y cineastas posteriores.
Mediante tomas largas, audaces y sostenidas y diálogos que parecen confesiones, Eustache captura a una generación que navega por la desilusión de los años 70 y, en el proceso, logra una intimidad tan profunda que casi resulta desgarradora.


Casi cuatro horas de película no son ninguna broma, hay que estar en buena disposición para enfrentarse al bueno de Eustache a la hora de abordar el film y no todos quienes la vean tendrán opiniones convergentes. Para unos, un ejercicio de esnobismo, una obra pretenciosa cargada de diálogos interminables que no sirven más que para alargar una historia que les parecerá la de un diletante, un vago que vive a costa de otras personas. Para otros, el retrato certero de una generación desencantada que ha tirado la toalla y se encuentra sin objetivos, sin ganas de seguir en el combate por mejorar la sociedad. 
Mutatis mutandi, trasladable a otras épocas posteriores, por ejemplo la nuestra, en la que algunos jóvenes, a pesar del desencanto, encuentras salidas, mismamente en su propio trabajo profesional, otros adheridos a causas solidarias, incluso, equivocados o no, que esa es otra historia, alineados con las demagogias extremistas de uno u otro signo y sus cantos de sirena que aprovechan ese desencanto. Sin embargo, hay un núcleo nada desdeñable de gente brillante, preparada, hastiada de la deriva de las corporaciones tradicionales (partidos, sindicatos, iglesias...) en quienes solo ven núcleos de corrupción al servicio de intereses espurios, incapaces de llegar a acuerdos en pro del bien común y poniendo por delante sus egoísmos. Ese es Alexandre, un tipo que ha perdido la ilusión y que considera que todo está perdido. 
El film es una especie de certificado de defunción de las vanguardias, de las iniciativas populares, del existencialismo (se ríen de Sartre, a quien llaman borracho), una película casi apocalíptica.




martes, 28 de enero de 2025

EN LA CORTE DEL LOBO

 

Ambientada en los tormentosos años de la separación de Enrique VIII de su esposa Catalina de Aragón, ante la incapacidad de conseguir un heredero varón, aunque esta pareja y otros personajes están presentes en la trama, como no podía ser menos, el verdadero protagonista de la novela es Thomas Cromwell, hijo de un herrero que le maltrataba en su infancia, huye de la casa paterna viajando por Europa, luchará como soldado en las filas del ejército francés del rey Luis XII, participando en la batalla de Garellano que se saldó con la victoria de las tropas españolas de los Reyes Católicos a las órdenes del Gran Capitán, Gonzalo Fernández de Córdoba. Durante su estancia en Italia, Cromwell entabla relaciones con comerciantes tanto italianos como de los Países Bajos que le llevan a prosperar económicamente. A su regreso a Inglaterra, estudia leyes y se convierte en un influyente abogado, entrando al servicio del Cardenal Wolsey, canciller del reino. 
Cuando Wolsey cae en desgracia, Cromwell sigue siéndole fiel, lo que, al contrario de lo que pudiera parecer, hace que caiga en gracia al rey Enrique, que aprecia su lealtad hacia su señor aún en sus horas bajas. Cromwell está cada vez más cerca del monarca que le pide consejo y acabará nombrándole Canciller, lo que le convierte en el hombre más poderoso de Inglaterra tras el propio rey, al tiempo que acentúa la animadversión de buena parte de la nobleza, en parte por el poder que acumula en sus manos y también por carecer de sangre noble. 
Hilary Mantel, la autora de la novela, nos presenta a un Cromwell inteligente, astuto y justo, alejado del personaje cruel e intrigante que nos deparan las crónicas históricas, al tiempo que otro personaje importante de la novela, Thomas Moro, será retratado como un fanático ególatra, también alejado del héroe y mártir con que nos lo pinta el relato histórico convencional. 
Cromwell será la pieza clave en el nacimiento de la Iglesia Anglicana, la separación definitiva de la autoridad papal, el hombre que aconseja al monarca y le dicta los pasos a seguir para reformar la iglesia de Inglaterra y alejarse de las presiones del Papa Clemente y del emperador Carlos V. 
Con una prosa ágil y atractiva, Mantel hace desfilar ante nosotros a los principales y más poderosos personajes de la historia de Inglaterra en el momento de los hechos que novela, desde los ya mencionados, a la nueva reina, Ana Bolena o el duque de Norfolk y otros no menos influyentes, consiguiendo, con la narración de sus intrigas y luchas de poder, mantener nuestro interés y la expectación ante una historia, por otra parte, de sobra conocida. 
Buenos diálogos y descripciones vívidas y realistas, así como conseguidos retratos de los personajes para una historia en la que se entrecruzan, lealtades y traiciones, intentos de concordia y violencia, buenos propósitos con crueldad y ambición que dan como resultado una excelente novela con trasfondo histórico.




lunes, 27 de enero de 2025

LARGA ES LA NOCHE

 


Johnny McQueen (James Mason), uno de los militantes más importantes del Sinn Fein, el brazo político del IRA, se ha estado escondiendo en la casa de Kathleen Sullivan (Kathleen Ryan) y su madre, planeando el asalto a una fábrica que proporcionará a su grupo fondos para continuar con sus actividades. Durante el asalto, las cosas se tuercen: Johnny resulta herido, no puede regresar a su escondite y desaparece en los callejones de Belfast. Inmediatamente comienza una cacería humana a gran escala y la ciudad queda totalmente tomada por la policía, cuyo jefe está decidido a capturar a Johnny y a los demás miembros de la banda. Kathleen se lanza en busca de Johnny.


Basada en la novela Odd Man Out, del británico Frederick Laurence Green (F.L. Green), que también participa en la adaptación, y publicada en 1945.


No es una película política (ya se advierte de ello al inicio del film), lo del IRA es mera anécdota para enmarcar el verdadero asunto de la narración: El calvario de un hombre que se desangra por los oscuros callejones de Belfast, algunos de cuyos rincones retrata Carol Reed como ya hiciera con Viena en El tercer hombre
Asistimos a un desfile de personajes cuyas vidas se cruzan con las del fugitivo pero que en nada distraen el avance de la historia (quizá salvo en el caso del pintor), sino que, más bien, sirven como referente de un momento y una situación social. Con aire de impresionismo, el realizador británico juega con las luces y las sombras y algunos planos en los que coloca la cámara de manera talentosa y cuidadamente planificada que aumentan el dramatismo de la historia hasta llegar a un final grandioso y triste.




viernes, 24 de enero de 2025

ESTRELLAS EN LA TIERRA

 


Ishaan Awasthi (Darsheel Safary) es un niño de 8 años cuyo mundo está plagado de maravillas que nadie más parece apreciar: colores, peces, perros y cometas, que simplemente no son importantes en la vida de los adultos, que parecen más interesados en cosas como los deberes, las notas o la limpieza. E Ishaan parece no poder hacer nada bien en clase. Cuando los problemas que ocasiona superan a sus padres, es internado en un colegio para que le disciplinen. Las cosas no mejoran en el nuevo colegio, donde Ishaan tiene además que aceptar estar lejos de sus padres. Un día, un nuevo profesor de arte irrumpe en escena. Ram Shankar Nikumbh (Aamir Khan) contagia a los estudiantes de alegría y optimismo. Rompe todas las reglas de "cómo se hacen las cosas" al pedirles que piensen, sueñen e imaginen, y todos los niños responden con entusiasmo, todos excepto Ishaan. Nikumbh pronto se da cuenta de que Ishaan es muy infeliz y se propone descubrir por qué. Con tiempo, paciencia y cuidado, finalmente ayuda a Ishaan a encontrarse a sí mismo.


Producida y dirigida por la estrella de Bollywood Aamir Khan, que también tiene un papel destacado interpretando al profesor de arte. 
Es cine indio, hecho al gusto del público local, quiero decir que estamos hablando de un film largo (casi tres horas), con canciones, aunque es cierto que no demasiadas para lo que es habitual allí, ya que algunas se suprimieron en pro de aligerar el metraje; eso si, todas ellas con mensaje y alguna, como la que interpreta Nikumbh cuando se presenta a los alumnos, muy divertida y alegre.


En algunos momentos me ha parecido que el protagonista infantil está algo envarado, quizá sea una percepción mía sin demasiado fundamente y que, tal vez, hay en algunos pasajes un exceso de sentimentalismo, pero esto es también típico del cine hindú, cuyo público no ve las cosas con los ojos de los occidentales. 
Atención a los títulos de crédito, muy llamativos; los del principio a base de animaciones y los del final de la película, con imágenes de niños tomadas durante el recorrido que hicieron por toda La India en busca del joven que había de interpretar a Ishaan, imágenes reales tomadas en calles y plazas de aldeas y ciudades con niños jugando, a veces con juguetes destartalados, otras en que se les ve trabajando o divirtiéndose, todas ellas muy curiosas.


Estamos ante una película de las que yo llamo educativas, pero no únicamente para niños, sobre todo para los adultos y para la sociedad en general, de manera que no deja de ser aleccionadora, pero muy amena. 
Nos plantea el problema de los diferentes, niños con capacidades distintas que no son capaces de desarrollarlas con los métodos estándar y cuyas dificultades para aprender y entender el lenguaje educativo habitual, si no son detectadas o hasta que hay un diagnóstico, les llevan al sufrimiento y la desesperación porque no tienen herramientas para enfrentarlas. En una de las escenas de la película se ponen ejemplos de personas muy brillantes que tuvieron estos problemas (Leonardo, Edison, Einstein, Agatha Christie...), por supuesto que eso no quiere decir que todos los niños y niñas que sufren estos problemas van a ser grandes genios, pero al menos no tendrán que soportar el apelativo de lentos, vagos, improductivos, incluso tontos o retrasados sin son tratados de forma adecuada. 
La historia es una llamada de atención, una petición a la sociedad para que preste la ayuda que precisan estas personas, que dejen de ser consideradas "bichos raros" por tener dificultades físicas o psíquicas para adaptarse a la norma y sean consideradas como lo que son: Estrellas en la tierra, gotas de esperanza.




jueves, 23 de enero de 2025

EL GLOBO BLANCO

 


Razieh (Aida Mohammadkhani) quiere un pez dorado gordo para la celebración del Año Nuevo iraní, en lugar de los flacos que tiene en el estanque de su casa, porque el pez gordo parece bailar cuando nada, ya que además, tiene varias aletas. Después de muchos intentos, ella y su hermano Alí (Mohsen Kafili) convencen a su madre para que les dé su último billete. Pero el camino hasta la tienda donde venden peces de colores es largo y está lleno de peligros. Razieh, sola y desamparada, vive toda clase de peripecias en su afán por conseguir lo que quiere: le escamotean el dinero, aunque lo recupera y se le cae por el respiradero de una bodega antes de llegar a la tienda.


Con guion del consagrado realizador y guionista Abbas Kiarostami, el iraní Jafar Panahi, un director perseguido y acosado por las autoridades de su país desde hace veinte años, soportando encarcelamientos y torturas, porque molesta su crítica tierna y humanista, nos presenta este film que, a la postre, es el único suyo que se ha podido estrenar en su país; ninguna de sus otras películas, a pesar de que algunas han obtenido premios internacionales, se han visto en los cines de Irán.


El mundo visto de dos maneras diferentes, por un lado, desde el candor de una niña, por otro, el que vemos los adultos, lleno de trampas y sinsabores. Hay una escena que resume todo esto, en la que la niña, cuando está en la tienda para comprar el pez, le dice al dueño que aquel pez es más pequeño que los otros que tiene en el escaparate y éste le responde que lo está mirando mal, no hay que mirarlo desde arriba, sino desde un lado de la pecera y por el efecto de aumento del cristal, lo vuelve a ver grande y gordo. Así son (somos cuando tenemos esa edad) de ingenuos. Es el mundo de los Reyes Magos, del Ratoncito Pérez o de tantas otras cosas que perdemos con los años a medida que la cruda realidad nos va dando bofetadas. Por eso, la pequeña Razieh se encuentra con la incomprensión de los adultos, porque sus maneras de ver el mundo responden a diferentes realidades.




miércoles, 22 de enero de 2025

NIÑOS DEL PARAÍSO

 


En un descuido, Ali (Amir Farrokh Hashemian) pierde los zapatos de su hermana pequeña Zahra (Bahare Seddiqi), que había llevado al zapatero para que los reparara. Como sus padres no pueden permitirse comprar unos zapatos nuevos, deciden ocultarles lo ocurrido y compartir las zapatillas deportivas de Ali. Pero el plan tiene sus inconvenientes.


Con una gran economía de medios, el iraní Majid Majidi desarrolla este guion escrito por él mismo a partir de una situación prácticamente anecdótica y que refleja toda la dignidad que a veces esconde la pobreza.


A través del laberinto de callejuelas que conforman el humilde pueblo en que viven, que recorren de forma frenética los hermanos protagonistas, sentimos toda la angustia que les provoca la situación que atraviesan y las peripecias que ello les ocasiona. Niños obligados a madurar antes de tiempo, sumidos en la pobreza, pero aprendiendo también la hermandad y solidaridad de los que nada tienen que les enseñará a no ser injustos con nadie antes de valorar sus personales circunstancia. 
Una hermosa película cargada de valores, con un no menos hermoso y evocador final que abre una ventana a la esperanza.




martes, 21 de enero de 2025

EL COLOR DEL PARAÍSO

 


Mohammad (Mohsen Ramezani) es un chico ciego de ocho años de edad que ha aprendido a ver con el tacto y el oído y que estudia en un instituto especial en Teherán, donde aprende braille. Cuando llegan las vacaciones de verano regresa a su pueblo natal con su padre, sus dos hermanas y su abuela. Mohammad es un muchacho muy sensible y gran amante de la naturaleza que anhela vivir en su pueblo, una aldea perdida en la montañas del norte de Irán, con su familia; es una persona increíblemente adorable, cuya generosidad, su amor sincero y su afán por aprender contrastan con la vida temerosa y egoísta de su padre, un carbonero viudo cuya obsesión por casarse de nuevo y asegurarse que alguien le cuide en su ancianidad, le llevan a buscar cómo desprenderse de su hijo, al que considera una maldición de Dios, del que se avergüenza, por lo que quiere dejarlo en otro lugar para poder casarse con otra mujer. A pesar de las objeciones de la abuela, el padre pone a Mohammad como aprendiz lejos de casa, con un carpintero ciego.


En un entorno idílico de verdes prados salpicados de flores, con bosques y tierras de cultivo ubérrimas regadas por arroyos cristalinos, transcurre la vida de la familia de Mohammad. Nada les falta, pero, como ocurre entre tantos pequeños propietarios de tierra, nada les sobra y cualquier imprevisto puede trastocar la precaria economía de subsistencia.
Allí, el niño es feliz, el centro al que acude en Teherán, donde absorbe conocimientos como una esponja, queda al otro lado del mundo, como él dice. Ha aprendido a desarrollar sus sentidos de manera que percibe lenguajes y palabras en el picoteo de los pájaros carpinteros, en las formas de las espigas de trigo o en las piedras del fondo del río. Sería feliz conviviendo con sus hermanas, con su amorosa abuela y acudiendo a la escuela del pueblo con los otros niños a los que queda asombrados cuando lee su cuaderno escrito en braille. Pero su padre le considera un estorbo, quiere deshacerse del niño a toda costa.


Hay un par de escenas que resumen perfectamente el espíritu de la película del iraní Majid Majidi. En la primera de ellas, vemos a Mohammad rescatando a un pajarillo que ha caído del nido; tras espantar al gato que acosa al avecilla, el niño consigue, con mucho esfuerzo, trepar al árbol y descubrir el nido, donde deposita amorosamente a la pequeña criatura. La segunda escena es muy breve, vemos un pez que colea en un charco casi sin agua al que la abuela, a pesar de sus dificultades, rescatará y devolverá al riachuelo.
Y es que todos o muchos de nosotros, somos o seremos discapacitados en algún momento de nuestras vidas y necesitaremos una mano amiga que nos ayude. ¿Son las personas con discapacidad una carga?, es una manera de verlo desde un punto de vista puramente mercantilista y deshumanizado, pero no lo son más que los niños pequeños, los ancianos, las víctimas de accidentes laborales o de tráfico, los enfermos, los urbanitas a la hora de desenvolverse en la naturaleza, la gente del campo cuando deambula por la ciudad, el que no sabe nadar cuando cae al agua, los que han de soportar una catástrofe como la reciente DANA que asoló el levante de nuestro país, los estudiantes... Y no por eso les dejamos abandonados a su suerte, a pesar de la insolidaridad y el egoísmo de algunos, siempre hay una mano amiga dispuesta a prestar su apoyo desinteresado.
Una película llena de sensibilidad que aboga por la integración y por potenciar las habilidades de quienes tienen alguna carencia en sus sentidos. Una invitación a que, como hace el protagonista, aprendamos a ver con el corazón y no tanto con los ojos.




lunes, 20 de enero de 2025

¿DÓNDE ESTÁ LA CASA DE MI AMIGO?

 


En la escuela del pueblo de Koker, al norte de Irán, Mohamed (Ahmed Ahmed Poor) no ha hecho los ejercicios en el cuaderno, y el profesor le amenaza con expulsarle de la escuela si vuelve a repetir la misma falta. Esa misma tarde, su compañero Ahmed (Babek Ahmed Poor) toma por equivocación el cuaderno de Mohamed; cuando se da cuenta, decide ir a buscar la casa de su amigo para devolvérselo.


Primera de las películas de la llamada "Trilogía Koker", llamada así por críticos y estudiosos, algo con lo que no estaba muy de acuerdo el propio realizador, el iraní Abbás Kiarostamí, quien se resiste a la designación y señala que las películas están conectadas solo por el lugar en que se ambientan.


La película es una mezcla de poesía, documental y ficción que puede ser interpretada de varias maneras, desde una fábula infantil, hasta una crítica a los absurdos y trasnochados códigos de una sociedad, pasando por la incomprensión a que se ven sometidos los niños por parte de los adultos.
Ahmed tan solo quiere devolverle el cuaderno a su compañero y amigo que vive en un pueblo cercano, sabe que el muchacho será expulsado de la escuela si no lleva los deberes hechos en él al día siguiente, un castigo que se nos antoja desproporcionado. Pero el niño choca contra el muro de los adultos, que no solamente no le ayudan, sino que le prohíben hacer lo que tiene pensado, cuando no, directamente no le escuchan.
Un film que demuestra que cuando hay una historia interesante y se sabe contar, no hacen falta grandes presupuestos. El realizador iraní consigue con esta sencilla parábola crear suspense y tensión en el espectador, debido a la angustia que transmite la situación absurda a que se enfrenta el muchacho al que nos gustaría ayudar a realizar una tarea tan simple. Es a la vez un retrato de una sociedad pobre, con unos valores que se nos hacen extraños: niños que trabajan ayudando a sus padres, disciplina y obediencia sujeta a castigos cuando se incumplen los códigos de conducta... Todo muy alejado de la vida muelle que proporcionamos a nuestros hijos en occidente.
Una preciosa película que sabe hacer de lo sencillo algo trascendente.




viernes, 17 de enero de 2025

KES

 


Billy Casper (David Bradley), un chico de 15 años que vive en un pequeño pueblo minero del Condado de Yorkshire, no va bien en el colegio, donde sufre las burlas de sus compañeros, y en casa ha de lidiar con la indiferencia de su madre y un hermano mayor maltratador. Domestica y entrena a su mascota, un halcón, al que llama Kes. Ayudado y alentado por su profesor de inglés, el Sr. Farthing (Colin Welland), Billy finalmente encuentra un propósito positivo para su infeliz existencia, hasta que ocurre una tragedia.


Basada en la novela A Kestrel for a Knave, de Barry Hines, el propio escritor y el realizador Ken Loach, son los autores del guion que adapta el libro.


Despojado de ese maniqueísmo de que se le acusa en algunas de sus películas, el realizador británico nos acerca este drama social con un niño como protagonista y reflejo de una sociedad, la de los sesenta, en que la enseñanza era muy otra a la que conocemos en la actualidad, con algunos profesores (insisto en lo de algunos, ni mucho menos pretendo generalizar) que aplicaban el "ordeno y mando" cuando las situaciones se ponían complicadas o, sencillamente, no eran capaces de arreglar las cosas de otra forma. Sin dramatismo, acudiendo a la naturalidad en la narración, con una puesta en escena que se acomoda a un entorno real, Loach nos muestra cómo la potenciación de las capacidades y no la imposición, ni la rigidez de un sistema, pueden ayudar a encauzar con éxito la vida de alguien en un entorno que ofrece pocas expectativas de futuro. No hay mensaje ni soluciones en esta historia de gran carga emocional.




jueves, 16 de enero de 2025

LA LEYENDA DEL INDOMABLE

 


Luke Jackson (Paul Newman), un joven rebelde e impulsivo, es condenado a dos años de prisión tras causar graves destrozos en unos parquímetros estando borracho. En la cárcel, su indomable carácter chocará de frente con las rígidas normas de la institución, así como con el de otros presos, especialmente con Dragline (George Kennedy), que era el líder de los convictos hasta su llegada. Pero Luke es un veterano de guerra que no está dispuesto a ceder, aunque acabará pagando un alto precio por seguir siendo quien es.


Basada en la novela Cool Hand Luke, del norteamericano Donn Pearce, él mismo, junto a Frank Pierson y Hal Dresner, son los autores del guion, que estuvo nominado al Oscar como Mejor guion adaptado.


Uno de los clásicos más afamados dentro del subgénero carcelario, con una buena interpretación de Mr. Newman (como siempre, diría yo), bien secundado por un George Kennedy que se llevó el Oscar al Mejor Actor de Reparto por este trabajo. 
Con algunas secuencias de esas que perduran para siempre en la retina del espectador, el film es una oda a la rebeldía y una denuncia contra el abuso de poder, el sadismo y los castigos desproporcionados.




miércoles, 15 de enero de 2025

JEANNE DIELMAN, 23, QUAI DU COMMERCE, 1080 BRUXELLES

 


La vida de Jeanne Dielman (Delphine Seyrig), una viuda de mediana edad con un hijo, Sylvain (Jan Decorte), sigue un orden inmutable: mientras el muchacho está en la escuela, ella se ocupa de las tareas domésticas por la mañana y ejerce la prostitución por la tarde.


Tres días en la vida de esta mujer que vive su rutina de una manera obsesiva, como si fuera un ritual, así la vemos hacer las camas, preparar la comida, ir a la compra, recibir a algún cliente... Puede parecer absurdo de puro simple, pero la manera de contarlo de Chantal Akerman, guionista y directora del film, de forma detallada y minuciosa, se torna casi hipnótica para el espectador, convirtiendo el film en un experimento singular.


Señalar que a muchos les parecerá aburrida, incluso tremendamente aburrida, con ese desfile de secuencias cotidianas filmados con cámara fija y que duran varios minutos, sin que nada más suceda y es que queda a interpretación del espectador esta manera de retratar la rutina que, de por sí, es algo aburrido. Desde luego poco recomendable para quien busque cine de entretenimiento, porque aquí lo que se busca son otras cosas.
Tenido por un film de marcado acento feminista, podríamos decir que la película consigue desviar un argumento que es pura rutina hacia el melodrama y la tragedia burguesa.




martes, 14 de enero de 2025

MIAMI BLUES

 

El sargento de homicidios Hoke Moseley, es un tipo que da un poco de pena, divorciado, rayando en la pobreza por mor de la pensión que ha de pasar a su ex-esposa y su hija y que vive en un hotel, El Dorado, en el que solo se alojan jubilados, que, a cambio de ejercer como encargado de seguridad en sus horas libres, le cede una cochambrosa habitación. Por pura casualidad, su vida se cruzará con la de Fred Frenger Junior, un delincuente recién salido de prisión, que se ha trasladado a Miami en busca de nuevas oportunidades, un tipo al que se la ha ido un poco la olla y que ve el mundo de la delincuencia con una cierta perspectiva empresarial: Es una especie de negocio. Fredie mantiene una relación con Susie, una prostituta que aparenta muchos menos años de los que tiene y, aunque ya de por sí es muy joven, parece una niña. Susie es un tanto ingenua, pero no es la tonta que algunos llegan a pensar, a su manera, tiene sus propios recursos. Cuando Junior ataca a Moseley, robándole su arma, su placa y su dentadura postiza, no imagina que se ha puesto en contra al tipo equivocado, el sargento no olvidará a quien le ha enviado al hospital y que, en cierto modo, ha dejado su orgullo por los suelos. 
Miami, una ciudad a la que Charles Willeford, pinta como una jungla peligrosa, hábitat perfecto para rateros y vividores, poblada por hispanos que se mueven entre los trabajos mal pagados y la delincuencia, es otro personaje de la novela. Junto a sus protagonistas recorremos sus calles, barrios y zonas residenciales, participando de la locura de su tráfico rodado y conociendo a algunos de los sujetos que la habitan. 
El libro es un clásico de la novela negra, el título que dio fama a su autor, con policías y delincuentes peculiares que, en algunos momentos, se salen del estereotipo del género y tanto Mosley, como Junior, son personajes muy logrados y diferentes a los que acostumbra a ofrecernos la literatura negra. Con muchos momentos que destilan un humor negro que nos lleva a la sonrisa, estamos ante una novela atractiva y entretenida, de esas cuyos personajes perduran en el recuerdo. 
Fue llevada a la pantalla grande con el mismo título, en un film de 1990 dirigido por George Armitage, con Alec Baldwin, Fred Ward y Jennifer Jason Leigh, interpetando los principales papeles.