Dos americanos que comparten piso en París, el pintor George Curtis (Gary Cooper) y el dramaturgo Thomas B. 'Tom' Chambers (Fredric March), conocen en un tren a Gilda Farrell (Miriam Hopkins), una joven que trabaja en una agencia de publicidad. Inmediatamente ambos se enamoran de ella, poniendo en serio peligro su amistad de 11 años. Gilda, incapaz de decidirse por ninguno de los dos, les propone un "pacto entre caballeros": vivirá con los dos de forma totalmente platónica y les ayudará con sus carreras artísticas.
El guion adapta la obra de teatro Desing for living, del británico Noël Coward, de la que en realidad, la película únicamente conserva una línea. Como comentaron el productor y realizador del film Ernst Lubitsch y el guionista Ben Hecht: "¡Por el bien de nuestras almas inmortales!" (lo que no dijeron es que había líneas de otras obras de Coward en el guion)
La película supuso un notable escándalo en su momento por tratar, en definitiva, de un "menage a trois", pero, por otro lado, obtuvo un buen resultado en taquilla.
Es evidentemente un argumento adelantado para su época y también provocador, cuyos momentos que podrían resultar más comprometidos por lo explícito, Lubitsch resuelve a partir de sus habituales elipsis, con puertas que se cierran o desayunos en bata, que lo dicen todo pero nada muestran.
Elegante y divertida comedia.
Todo un hito pra su época. Me encantan estas comedias. Un beso
ResponderEliminarUn argumento muy controvertido en su momento.
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