Mientras el Rey Ricardo (Ian Hunter) combate en las cruzadas contra los infieles, su hermano Juan (Claude Rains) ha usurpado el trono y gobierna despóticamente. El noble sajón Robin de Locksley (Errol Flynn), se refugia en el bosque de Sherwood y, al tiempo que se rebela contra la autoridad normanda, roba a los ricos para entregárselo a los pobres, corteja a la encantadora Marian (Olivia de Havilland) e intenta frustrar los planes del cruel Sir Guy de Gisbourne (Basil Rathbone) y apartar del trono al infame Príncipe Juan para devolvérselo a Ricardo.
El guion se inspira en el legendario personaje cuya historia se transmite en las baladas que circulaban en boca de bardos y juglares a lo largo de los siglos XII y XIII.
Michael Curtiz, que sustituyó a William Keighley (se dice que prácticamente las escenas se dividen al cincuenta por ciento entre las que rodaron uno y otro), dirige esta trepidante película que, prácticamente desde su estreno, ha devenido en un clásico del cine de aventuras. Fotografía de Sol Polito en un espléndido technicolor con un cromatismo lleno de variedad de colores, el film mantiene un conseguido tono humorístico, planos tomados con grúa y escenas realmente memorables.
Una maravilla de película. En épocas más modernas se rodaron otras que se ven con agrado, pero ésta es la mejor de todas.
ResponderEliminarYa sabes que la cosa va en gustos, pero la mítica es esta.
EliminarOtro de los clásicos de una época sin relativismos, los buenos eran buenos y los malos muy malos. Una de esas películas que, cuando repiten, cae. Supone también un homenaje a mi niñez.
ResponderEliminarUn saludo
Y a la de tantos otros.
EliminarDe cuando el cine y los sueños estaban hechos de la misma pasta.
ResponderEliminarMás o menos.
EliminarPelícula entrañable, de recuerdos imborrables, con un buen ritmo y muy entretenida. Un clásico con mayúsculas.
ResponderEliminarLo es.
EliminarQué utopía esa de que alguien le quite a los ricos para darlo a los pobres, sin comisiones, gastos de gestión o impuestos.
ResponderEliminarPues sí.
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