miércoles, 5 de junio de 2024

LA REGLA DEL JUEGO

 


Un rico aristócrata duda si abandonar a su amante para conservar el amor de su esposa, una mujer cortejada al mismo tiempo por su confidente y un famoso aviador. En el trascurso de una cacería de fin de semana en Sologne y de una fiesta posterior, las intrigas amorosas de señores y sirvientes se mezclarán desembocando en un hecho inesperado.


Tenida casi de forma unánime como la obra maestra de Jean Renoir, la película fue un absoluto fracaso tras su estreno, debido en parte a una serie de circunstancias que fueron interpretadas de forma errónea, únicamente muchos años después fue reconocida en toda su grandeza esta visión de la sociedad francesa de 1939, una farsa tragicómica, sátira mordaz, pero al tiempo, compasiva, aunque, claramente, los espectadores franceses de la época se quedaron solamente con la primera de sus dos vertientes.


No se si por clarividencia o por mera casualidad, bajo una cierta apariencia de comedia de enredo, Renoir radiografía de forma certera el ambiente de la alta sociedad francesa en un momento en que Europa estaba patas arriba y ellos se dedicaban a vivir en su limbo, rodeados de lujo, transitando de la indolencia al aburrimiento y pendientes del qué dirán mientras solo miran a su propio ombligo volviendo el rostro a la sociedad que les rodea. Un mundo ante el que las clases bajas se limitan a imitar sus peores vicios. Todo ello nos conduce a un final pseudo dramático que remarca la hipocresía del ambiente que la película nos muestra.
Renoir hace un uso extraordinario de la amplitud de campo que le permite mostrar, en una misma escena, situaciones diferentes, incluso contrapuestas.
 



6 comentarios:

  1. Pocos cineastas han alcanzado la clarividencia de Renoir.

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  2. La vi hace años en televisión y me pareció demoledora. Como una pandilla de fantoches bailando al borde del desastre. ¿Nos parecemos en algo hoy día?

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