jueves, 25 de julio de 2019

ÚLTIMO TREN A KATANGA

A mediados de la década de los 60 del pasado siglo, el presidente congoleño Ubi (Calvin Lockhart) contrata al mercenario Bruce Curry (Rod Taylor) para rescatar a los residentes europeos de una ciudad aislada a punto de ser atacado por los rebeldes Simba en el antiguo Congo Belga.
En realidad su misión es recuperar un depósito de diamantes, por valor de cincuenta millones de dólares, del lugar donde los tiene almacenados una compañía minera. Curry se hace con los servicios de un grupo de personas que le ayudarán en su misión, entre ellos su inseparable amigo Ruffo (Jim Brown) y el médico alcohólico Wreid (Kenneth More). También recurre, a regañadientes, al ex nazi Henlein (Peter Carsten) porque necesita su experiencia militar y considera que sus habilidades de liderazgo pueden serle de utilidad.
El presidente congoleño proporciona a Curry un tren de vapor y un destacamento de soldados que estarán bajo sus órdenes directas. En el camino de ida se suceden los incidentes, el tren es atacado por un avión de las Naciones Unidas; los mercenarios rescatan a Claire (Yvette Mimieux), cuyo esposo ha sido asesinado por los Simba y lo que era su casa, ha desaparecido pasto de las llamas y Henlein, a quien le molesta el liderazgo de Curry, comienza a causar problemas porque el alemán sabe que el verdadero fin de la misión son los diamantes. Las cosas llegan a un punto de ebullición cuando mata a dos niños de los que sospecha que son espías rebeldes. Después, Henlein hace propuestas románticas a Claire, que Curry interrumpe. Henlein atacará a Curry y este no tiene más remedio que defenderse ante la insubordinación del alemán y los problemas que está creando, incluso llega un momento en el que está a punto de matar a Henlein, pero Ruffo lo detendrá.
La misión, mal que bien, sigue adelante, pero las dificultades y los imprevistos, continúan apareciendo y el camino de regreso, será mucho más complicado que lo fue el de ida.


El guión se basa en la novela The Dark of the Sun, del sudafricano Wilbur Smith. El título de la novela es el mismo que lleva la película, que cambió para la versión española, cuando lo cierto es que los acontecimiento ocurridos en Katanga no son los que sirven de fondo a la película que tiene más que ver con la revuelta Simba de 1964-65.
Su director es el británico Jack Cardiff, no muy conocido en esta faceta, pero sí como director de fotografía, aspecto en el que es un verdadero mito en el mundo del cine, ganador de un Oscar por Narciso Negro y figurando al frente de la fotografía en films muy conocidos, como Las zapatillas rojas, La Reina de África, La condesa descalza, Guerra y Paz, El príncipe y la corista, Los vikingos, Muerte en el Nilo o Los perros de la guerra.


Llama la atención la violencia explícita de este film en una época en que no era nada habitual y eso que hubo escenas que fueron cortadas y solo se observa una parte de lo que se filmó, lo que, por otra parte hace que el montaje resulte un tanto confuso y atropellado cuando se muestran estas secuencias.
El relato es sencillo y apenas aporta sorpresas, todo se va desarrollando conforme el espectador puede prever fácilmente.
Aunque algunos diálogos resultan de cierta brillantez en su contenido, sin duda fruto de la novela original, a la hora de plasmarlos, los actores no siempre están a la altura en mi opinión.
Las anécdotas alrededor del film son variadas y tampoco me voy a detener demasiado en ellas, únicamente señalar que Quentin Tarantino es un enamorado de este film al que se ha referido en varias ocasiones. En su película Malditos bastardos, utiliza algunos cortes de la melodía original del francés Jacques Loussier y, como homenaje al mismo, incluyó al propio Rod Taylor en el papel de Churchill.
El asunto político solo sirve como telón de fondo y apenas se habla del mismo en la película que resulta un tanto interesada, presentándonos a unos mercenarios que parecen los únicos buenos de la película.
Jack Cardiff consigue una película peculiar, con buenas dosis de acción y que resulta bastante entretenida. Con el paso de los años se ha convertido en una especie de película de culto.




No hay comentarios:

Publicar un comentario