viernes, 26 de julio de 2019

CLAMOR DE INDIGNACIÓN

Joe Kirby (Harry Fowler) lee en voz alta a su pandilla un cómic de la revista Trump, pero se da cuenta de que falta una página. Luego compra otro ejemplar para poder seguir las aventuras del detective ficticio Selwyn Pike. Mientras lee una parte de la última historia, Joe descubre que la aventura cómica se repite exactamente en la vida real cuando se encuentra con dos hombres que llevan unas cajas (Joe cree que contienen cadáveres) a la tienda de pieles del Sr. Jago (Paul Demel). Incluso la matrícula del camión (GZ 4216) coincide con el cómic.
Cuando Joe se esconden en la tienda de Jago para averiguar qué es lo que está ocurriendo, el dueño lo descubre y llama a la policía, aunque no presenta cargos contra el. Más tarde, Joe le habla al inspector Ford (Jack Lambert) de sus sospechas, este le aconseja que no se deje influenciar tanto por los comics y le envía a hablar con Nightingale (Jack Warner), un tendero del Covent Garden, para que le de trabajo. Al contrario que Ford, al Sr. Nightingale le hacen gracia las historias de Joe.
Más tarde, en su escondite en un edificio bombardeado, los amigos de Joe se burlan de él por el incidente, hasta que otro niño dice que vio un camión con placa GZ 4216 esa mañana. Joe cree que los criminales están planeando trabajos a través del Trump. Para saber más visitan al autor del cómic, Felix Wilkinson (Alastair Sim). Joe y Alec (Douglas Barr) encuentran la casa de Wilkinson, descubriendo que las ediciones del cómic están siendo manipuladas y se lo dicen a Wilkinson. Este se da cuenta de que los criminales están usando los códigos del cómic para comunicar sus planes pero, temeroso de la pandilla, Wilkinson se niega a ayudar a los niños.


En algún lugar he leído que el guión se basa en la novela 'Emil and the Detectives' de Erich Kästner. Kästner fue un autor alemán famoso sobre todo por sus publicaciones para el público infantil y juvenil, aunque también cultivó otros géneros. Formó parte del movimiento Neue Sachlichkeit (Nueva objetividad), en el que se encuadran escritores tan conocidos como Joseph Roth, Hermann Hesse, Carl Zuckmayer, Erich Maria Remarque, Thomas Mann o Heinrich Mann. De cualquier modo, he de aclarar que no tengo constancia de ello y que no se hace mención alguna en la película, en cuyos títulos de crédito se dice que es un guión original.


Cuando ves esta película, sobre todo para quienes las han leído, es inevitable recordar las aventuras de Guillermo, de Richmal Crompton o de Los Cinco, de Enid Blyon. Aquí también tenemos a un grupo de adolescentes que se meten en líos al tratar de resolver por su cuenta un asunto delictivo en el que correrán peligros sin cuento.
La narración es muy dinámica y la tensión dramática viene dada, en buena parte, de que los chicos no encuentran eco entre los adultos que podrían ayudarles, por lo que, empeñados como están en llegar al fondo del asunto, han de ser ellos mismos quienes lleven adelante las averiguaciones. Su propia condición de jóvenes, es la que dificulta su trabajo, pero al tiempo, la solidaridad que hallan en otros muchachos, supondrá una buena ayuda.
La película tiene muchas cosas llamativas, desde los originales títulos de crédito a los "bocadillos" que, a imagen de los comics, hacen ver al espectador, en una de las secuencias del principio, lo que está leyendo el protagonista en la historieta. Muy llamativo si tenemos en cuenta que estamos hablando de una película de 1947.
Magnífica la fotografía de Douglas Slocombe, con algunas escenas grandiosas, como la de la subida por la escalera de caracol hacia la casa del autor de los comics, en la que vemos ascendiendo las sombras de Joe y Alec reflejadas en la pared, cruzándose con un gato o los magníficos picados en las calles amplias y oscuras que acentúan la soledad y decepción de la pandilla cuando sus planes van fracasando. Una maravilla.
La película tiene el valor añadido de mostrarnos el Londres medio derruído tras los bombardeos de la guerra, un entorno, por otra parte, muy bien aprovechado para la historia, pues en él, los chicos se mueven como pez en el agua, además de ofrecer un decorado perfecto para algunas de las escenas.
En lo único que el paso del tiempo ha afectado a la película es en la forma de vestir y alguno de los comportamientos de los jóvenes, por lo demás, puede ser vista ahora con el mismo interés, pues la historia resulta de lo más original y entretenida.




4 comentarios:

  1. Hace tanto tiempo y ya estaba Trump haciendo de las suyas.

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  2. Muy buena: comienza con ella la era Ealing. Por cierto hay una película anterior de Gerard Lamprecht, de 1931, que se llama "Emil und die Detektive" (aquí se titulo Emilio y los detectives), bastante buena, la trama es parecida, así que pueden ser ambas versiones de la novela que mencionas.

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    Respuestas
    1. He oído hablar de esa película, aunque no la he visto y yo creo que donde leí la información de que esta se basa en la novela de Kästner, se han liado un poco, ya que, como digo, los títulos de crédito de "Hue & Cry", indican que es un guión original.

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