miércoles, 8 de febrero de 2023

MAYERLING

 


El archiduque Rodolfo (Omar Sharif), heredero del Imperio Austro-Húngaro, lleva una vida tediosa a pesar de estar rodeado de toda clase de lujos. Incluso sus amoríos le aburren, pero un día conoce a Marie (Catherine Deneuve) y se enamora perdidamente de ella. Sin embargo, el emperador Francisco José (James Mason), aunque no pone reparos a que su hijo tenga amantes (él mismo las tiene) considera que Marie no es una mujer adecuada y menos, cuando Rodolfo se empeña en que quiere separarse de su esposa legítima, la princesa belga Estefanía (Andréa Parisy), hija de Leopoldo II de Bélgica, y casarse con su nuevo amor.


El guión, del propio realizador Terence Young, adapta la novela del mismo título de Claude Anet (seudónimo de Jean Schopfer), así como el libro "El Archiduque", de Michel Arnold, que cuentan la historia de amor que el heredero del Imperio Austro-Hungaro, Rodolfo de Habsburgo, mantuvo con la baronesa Maria Vetsera que desembocaron en los trágicos sucesos ocurridos en el pabellón de caza del palacio de Mayerling el 30 de enero de 1889, siempre envueltos en el misterio y con cuya versión oficial, no todos están de acuerdo.


Concebida como una gran superproducción, el ambiente sociopolítico que se vivía en Viena en aquellos años, está presente durante toda la película, de hecho, el film se abre con una carga de caballería sable en mano, contra una manifestación estudiantil, a las mismas puertas del palacio imperial. Sin embargo, el difícil equilibrio que mantenía la monarquía dual, con el nacionalismo húngaro cada vez más exacerbado, se trata de forma tangencial, centrándose la narración, por un lado, en la relación romántica entre los dos protagonistas y, por otro, el enfrentamiento constante entre el emperador y su hijo por la diferente visión que tienen de la vida, en general y de la política en particular. Se nos presenta a un archiduque cercano a los círculos liberales, aunque siempre dentro de unos límites y a un emperador conservador, en cierto sentido intransigente y dispuesto a cualquier medida con tal de mantener la inestable unión del imperio. 
Bien ambientada, con un amplio despliegue de decorados y vestuario que reviven el esplendor de la corte, sin embargo el film no acaba de tomar altura y la relación entre una gélida Catherine Deneuve y un apuesto Omar Sharif, tampoco, dando como resultado una película bastante normalita con un lujoso envoltorio a ritmo de vals, como no podía ser menos.




4 comentarios:

  1. Como tú dices, se trata de una superproducción (con todo lo que eso implica), probablemente la respuesta británica para intentar emular el éxito de "El gatopardo" de Visconti.

    ResponderEliminar
  2. Hola Trecce!
    Es curioso, viendo el poster hubiese pensado que la trama tenia poco o nada que ver con lo que has contado. Me la apunto.
    Saludos!

    ResponderEliminar