miércoles, 15 de febrero de 2023

EL DERECHO A MATAR

 


Una noche, Michel Gerfaut (Alain Delon) descubre a un herido dentro de un coche, pensando que ha sido víctima de un accidente, sin darse cuenta de que, en realidad, le han disparado. Se lo lleva al hospital y se va sin hacer ninguna declaración. Cuando los sicarios intentan asesinarle en la playa y después ve en el periódico la noticia de la muerte del hombre al que auxilió, Michel se da cuenta de que acaba de meterse de lleno en una peligrosa conspiración destinada a eliminar uno por uno a los dirigentes de una empresa de armamento, convirtiéndose para algunos, en un incómodo testigo.


Producida por Alain Delon, el guión adapta la novela de Jean-Patrick Manchette Le Petit Bleu de la côte ouest, reeditada a raíz del estreno del film con el título de éste en francés: Trois hommes à abattre.


Correcta realización del francés Jacques Deray en una historia que va muy acorde para el lucimiento de su protagonista, aunque resulte un poco forzada en alguno de sus giros. Gerfaut pasa a ser un jugador de póker profesional, en lugar del gris ejecutivo que presenta la novela original que, en lugar de amedrentarse cuando es perseguido por los profesionales del crimen, les planta cara. 
Acción si pausa, tiroteos, muertos y las escenas de persecución en automóvil por las calles de la capital parisina y las autopistas que la rodean que son de lo mejorcito de la película, junto a un final sin concesiones, de esos que, en cierto modo, te hacen olvidar algunos de los momentos menos conseguidos del film. 
Además vemos a Delon luciendo torso y la belleza estilizada de Dalila di Lazzaro, luciendo torso también, en ambos casos de forma generosa, así hay para ellos y para ellas y todos contentos.




6 comentarios:

  1. Yo no me fiaría de una actriz que se llama Dalila di Lazzaro, alguna traición le haría al héroe de la película.

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    1. No se si te fiarías o no, desde luego, si te llamaras Sansón harías bien en no hacerlo, pero de lo contrario, no se si serías capaz de no dejarte seducir por sus sobrados encantos. Ja, ja, ja.

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  2. Hola Trecce!
    Pues otra que me apunto. Creo que este tipo de personajes Delon los encarna bastante bien.
    Saludos!

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  3. Otro "polar" genuinamente parisino. La presencia del apolíneo Delon era siempre garantía de éxito.

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    1. Todo un sex simbol que era un atractivo reclamo para que el film resultara rentable.

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