LA DECISIÓN DE SOPHIE

 

Stingo (Peter MacNicol), un joven aspirante a escritor, se instala en una pensión familiar de Brooklyn. Su tranquilidad se verá pronto turbada por la terrible discusión de una pareja que vive en el piso de arriba. Cuando conoce a los amantes queda cautivado por su encanto y simpatía. Ella, Sophie Zawistowska (Meryl Streep), es una hermosa emigrante polaca y católica. Él, Nathan Landau (Kevin Kline), un encantador y desequilibrado científico judío. Poco a poco, Stingo se convierte en su mejor amigo. Sophie, hija de un ilustre profesor polaco, sobrevivió al campo de exterminio de Auschwitz, pero vive atormentada por su pasado.

Ambientada en el verano de 1947, el guion adapta la novela del mismo título del norteamericano William Styron. La fotografía del film, está a cargo del español Néstor Almendros, nominado al Oscar por su trabajo.

Aunque la narración toma como base acontecimientos de la II Guerra Mundial, lo hace desde un enfoque diferente, centrándose en este caso en las consecuencias que la aplicación de la ideología nazi tuvo en una parte de la población de los territorios ocupados, unas consecuencias terribles por la crueldad y el menosprecio al ser humano que albergaban. Sophie no quiere hablar de su pasado y cuando lo hace lo disfraza y, en ocasiones, cuenta las cosas absolutamente adulteradas, en parte por la vergüenza, porque, sin serlo, se siente culpable de las cosas que le han ocurrido. Stingo es el narrador de la historia, un reflejo de nosotros mismos, los espectadores, que asistimos horrorizados a un drama terrible, de una crueldad nunca vista y que nos hace reflexionar sobre lo que hubiéramos hecho nosotros sometidos a las circunstancias de la protagonista, seguramente, como ella, cortarnos las venas. 

La interpretación de Meryl Streep supuso la definitiva consagración de una de las intérpretes más relevantes y reconocidas del cine moderno, en una película de una dureza inusitada que pudo haber sido mucho más de lo que fue porque notamos que a un relato de tanto potencial, le falta algo, hay quien lo achaca a un ritmo equivocado o a que no están bien colocados los flashback que nos cuentan la historia pasada de Sophie, no se cuál será la razón, pero lo que sí es cierto es que el film, actualmente, está bastante olvidado, siendo como es una buena película de esas que merece la pena ver.