martes, 19 de marzo de 2019

MUNICH

En septiembre de 1972, haciéndose pasar por atletas, un grupo de palestinos logra introducirse en las instalaciones de la villa olímpica donde se alojan los deportistas que participan en los Juegos Olímpicos de Munich.
Pertenecientes al grupo terrorista "Septiembre Negro", los asaltantes toman como rehenes a varios atletas y entrenadores israelíes, exigiendo como rescate, la liberación de prisioneros árabes que consideran ilegalmente presos en cárceles de Israel.
El gobierno israelí se niega a ceder a las pretensiones de los terroristas que terminan por asesinar a once de los rehenes.
Más allá de la respuesta oficial ante la masacre, el gobierno de Golda Meir decide formar un equipo encubierto, cuya misión será tomar venganza, matando a a aquellos palestinos a quienes consideran responsables de la matanza.
Este equipo no tendrá vínculos oficiales, ni con el gobierno, ni con el Mossad, aunque sí un enlace con el mismo, Ephraim (Geoffrey Rush). El líder será un empleado del servicio secreto, Avner (Eric Bana), a quien han convencido para que abandone a su esposa embarazada, olvide su identidad y desaparezca de la faz de la tierra para cazar y matar a los once hombres acusados por los servicios secretos israelíes de haber planeado la matanza de Munich.
A pesar de su juventud y de su falta de experiencia, Avner no tarda en hacerse con las riendas de un equipo de cuatro miembros (además de él) tan diferentes como hábiles: Steve (Daniel Craig), un surafricano temerario y duro; Hans (Hanns Zischler), un judío alemán experto en falsificar documentos; Robert (Mathieu Kassovitz), un fabricante belga de juguetes reconvertido a fabricante de explosivos; y Carl (Ciaran Hinds), un hombre silencioso y metódico.
Desde Ginebra, Frankfurt, Roma, París, Chipre, Londres hasta Beirut, Avner y su equipo viajan de incógnito, buscando a cada uno de los objetivos incluidos en una lista secreta, asesinándolos uno a uno mediante complicados complots. Obligados a trabajar fuera de la ley, siempre de un lado a otro, sin hogar ni familia, la única conexión con otros seres humanos son los demás miembros del equipo. Pero incluso esta relación se resquebraja cuando empiezan a discutir por preguntas que se hacen cada vez más presentes.
Atrapados entre el deseo de justicia y las crecientes dudas, la misión empieza a corroer las almas de Avner y de su equipo.


Esta película está basada en el libro de George Jonas "Venganza" (1984). Pretende contar la verdadera historia de la venganza contra los terroristas de Septiembre Negro utilizando la información proporcionada por un supuesto agente del Mossad llamado Yuval Aviv como fuente principal de Jonas. Los servicios de inteligencia israelíes siempre lo han negado, diciendo que Aviv es un fraude. Aviv argumenta que lo negarían de todos modos.
El libro y la película difieren en cuanto a que Spielberg es mucho más comedido en sus planteamientos haciéndonos ver que los miembros del grupo israelí tienen reticencias morales sobre lo que están haciendo y se cuestionan los fines de su misión. El autor del libro, sin embargo, lo tiene muy claro y establece una clara diferencia entre terrorismo y contraterrorismo, sosteniendo que Aviv jamás se cuestionó la legitimidad del encargo que había recibido que considera una acción justa y proporcionada.
La película hace ver que esas dudas morales del grupo son las que originan el fin de la misión, mientras que la realidad, al parecer, fue el incidente de Lillehammer, que no se menciona en la película, cuando en esta localidad noruega, el grupo encontró a uno de los terroristas. El objetivo estaba saliendo de un autobús con una mujer embarazada, y lo mataron. Pero más tarde se reveló que habían disparado al hombre equivocado. Ni siquiera era palestino, sino un camarero marroquí, y la mujer embarazada era su esposa.


Así pues, frente al libro de Jonas, la película de Spielberg construye un relato que cobra cierta equidistancia ante la actitud de ambos bandos, presentándonos un problema que se nos antoja irresoluble y que si alguna vez se llega a algún acuerdo entre las partes, será ante el convencimiento de que pueden seguir matando por los siglos de los siglos, pero nunca van a renunciar a sus postulados y poner fin a esa sangría sin fin.
"Septiembre Negro" abrió la caja de los truenos y el gobierno israelí, con sus acciones de represalia la alimentó, entrando en una espiral de violencia y venganza de proporciones bíblicas.


Quizá por esto, el film no gustó a ninguno de los dos bandos y siempre se comentó que el lobby judío había influido en los premios a los que optaba la película, por ejemplo en los Oscar, de los que no pasó de la etapa de nominaciones, cuando optaba a cinco, entre ellos Mejor Película, Director y Guión Adaptado y también al de Mejor Banda Sonora, merced al esplendido trabajo de John Williams.
Del otro lado, los palestinos la pusieron en su lista negra, pues en ese bando tienen muy claro que ellos son los oprimidos y todo lo que suene a ser comprensivo con Israel, o a establecer equidistancias entre ambos, se contempla como un ejercicio de complacencia con el opresor.
Aparte de poner en cuestión que la política de ojo por ojo sirva para otra cosa que engendrar más odio, la película deja una visión desasogante de la realidad y de las estrategias políticas ocultas, con servicios secretos de medio mundo jugando a dos bandas, empezando por la propia CIA, suministrando informaciones y facilitando armas y medios a facciones enfrentadas, con tal de que les dejen al margen y no cometan atentados en su país.
Eso por no hablar de la frialdad con que contemplan algunos de esos llamados daños colaterales, aunque la película también pone de relieve cómo los miembros del comando, tratan de evitar que personas inocentes sufran daños, pero cuando lo hacen, por errores, fallos de cálculo o por cualquier otro motivo, lo ven como algo que tenía que suceder.
Un film muy interesante que además puede verse desde distintos ángulos y que gustará tanto o más a quienes no estén interesados en el conflicto o no lo conozcan suficiente, pues además de ser un film de los llamados políticos, tiene la fuerza de un buen thriller y la suficiente carga de suspense como para mantener atento al espectador durante todo su desarrollo a pesar de su larga duración.




6 comentarios:

  1. Que tal Trecce!
    La situo entre mis favoritas de Spielberg, la he visto en varias ocasiones y seguro que volvere a ella en algun momento. Me interesa ese periodo y como argumento lo encuentro interesante. Desconocia gran parte de los datos que comentas, me ha parecido que has hecho una muy buena reseña, no es facil considerando el tema que toca.
    Saludos!

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    1. Gracias por el comentario, me alegro que te haya parecido bien.

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  2. Muy interesante, una película para volver a ver.

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    1. Han sabido darle un enfoque atractivo, sin renunciar a la profundidad que requiere el tema.

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  3. Tengo un problema con esa película y es que antes de verla había visto una película que trata sobre el mismo tema, titulada LA ESPADA DE GEDEÓN que me puso los pelos de punta. Por eso cuando fui a ver la versión de Spielbert...no la disfruté tanto

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    1. De cualquier modo, es un tema peliagudo que despierta pasiones, por las convicciones enfrentadas y firmemente sostenidas de los contendientes.

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