lunes, 5 de octubre de 2009

LICENCIA PARA MATAR

No es que el personaje de Jonathan Hemlock, interpretado por Eastwood se parezca a Indiana Jones, sino que algunos han visto un precedente del mismo. ¿De dónde sacan esto? Pues de que Hemlock es profesor, alpinista y tiene una doble vida, porque se dedica a hacer encarguitos para eliminar gente (espías de los malos, por supuesto), así que en cierto modo, salvando las distancias, es un profesor y un aventurero como Indiana. Pero yo creo que aquí se acaban las similitudes. Además hay una escena de Indiana Jones, en la que rechaza a una alumna que se le insinúa, que es calcada de otra que hay en esta peli, lo cual no deja de tener su gracia, porque que un tipo que se dedica a matar, nos de clases de moralidad, es curioso. Esta escena es más bien un homenaje de Spielberg a Eastwood, por el que nunca ha ocultado su admiración.
Si empiezo enrollándome de esta manera, mal asunto, pero como se puede suponer por este "irse por las ramas", no hay mucho que alabar. Para empezar la peli que se titula The Eiger Sanction, tiene un título "tramposo" en su versión española, ya que pensamos que nos vamos a encontrar a James Bond y no es así, aunque haya espías.
Se puede ver, tiene tramos entretenidos, una buena fotografía, las escenas de escalada son muy realistas, un final inesperado y la banda sonora bastante buena. Como secundario más destacado, vuelve a trabajar con George Kennedy.
En cuanto a las curiosidades, pues que las escenas de escalada apenas tienen efectos especiales y que muchas fueron realizadas por el propio Eastwood, no sin la oposición de alguno de los magnates de la Universal que tenía miedo de que su actor más taquillero se lesionara, o algo peor, ya que un miembro del equipo falleció aplastado por una roca durante la filmación. Estas escenas son lo mejor y lo peor de la película, me explico: Por la parte negativa, se entretiene demasiado en ellas, tanto en el entrenamiento para la escalada, como en la propia escalada, aunque en este último caso esté más justificado, porque aquí se desarrolla el verdadero "meollo" de la trama. En la parte positiva: La belleza de estas escenas es inobjetable, estamos hablando nada menos que de Monument Valley y de lo Alpes Suizos ¡Quién no hace buenas fotos con esos escenarios!
Pues eso que es más bien para fervientes admiradores de Eastwood, que seguro que le sacarán mil y un méritos al film.

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