miércoles, 16 de diciembre de 2015

CARRIE

Carrie (Sissy Spacek), vive con su madre, una integrista religiosa con obsesiones muy peculiares que traspasa a su hija, a la que tiene mediatizada con sus manías.
Tras una clase de educación física, mientras se está duchando, Carrie, que sufre un retraso en su desarrollo físico, experimenta su primera regla, algo de lo que su madre jamás le ha hablado. La muchacha, al ver la sangre, sufre un ataque de pánico que origina las burlas de sus compañeras, hasta que la profesora pone orden y consigue, más adelante, que la dirección del centro, las castigue con una hora de actividades complementarias durante una semana, que consistirán en ejercicios físico. Esto hace que las chicas culpen a Carrie de su situación y, una de ellas, Chris Hargensen (Nancy Allen), trama una venganza que llevará a cabo durante la fiesta de fin de curso.
Mientras tanto, Carrie, además del menosprecio de sus compañeros, habrá de soportar que su madre la culpabilice  de su condición de mujer, llamándola pecadora y encerrándola en un cuartucho para que medite. Carrie descubre que tiene poderes telekinésicos que, al principio no controla, pero que poco a poco va sabiendo manejar.
Otra de las compañeras, Sue Snell (Amy Irving), se siente culpable por las burlas a Carrie, por lo que le pide a su novio, Tommy Ross (William Katt), que invite a Carrie al baile de graduación, aunque al principio ella se muestra reticente, porque sospecha una trampa, acaba aceptando acompañar a Tommy.


Basada en un relato de Stephen King, cuyas obras, a partir precisamente de esta película, han dado pie a más de una adaptación cinematográfica.
Algunas partes del relato, desaparecen o están alteradas, pero ello no quita valor a la película, al contrario, al propio Stephen King, le gustaba más el final del film (una de las cosas que se alteraron), que el de su propia novela.


Con el paso de los años, Carrie se ha convertido en uno de esos films llamados de culto, porque marcó un camino en la senda de las películas de terror.
Con un presupuesto modesto, Brian De Palma consiguió un producto de calidad, magníficamente narrado y muy bien planificado, sin caer en la tentación de alargar las escenas, ni recrearse en los momentos más conseguidos.
Magníficas Spacek y Piper Laurie (como el resto del elenco), la película que es aparentemente una historia de terror y poderes extrasensoriales, en el fondo no deja de ser un drama, el de una chica atormentada por una madre cuya mente está enferma (en cierto modo me recuerda a Marnie, la ladrona), sin que falten otro tipo de lecturas que se pueden hacer, como el acoso escolar.
El film logra captar la atención del espectador desde su escena inicial y mantiene muy bien la tensión por medio del cerco de maldad que rodea a Carrie, hasta el punto de que el espectador aprueba, o al menos se muestra comprensivo, con la venganza que ésta se toma a través de sus poderes.
Para acabar de redondear esta buena producción, la música de Pino Donaggio, que consigue acompañar a la perfección cada uno de los momentos de la película.




2 comentarios:

  1. Si hay que sacar una enseñanza moral a esta película, es que los padres son muchas veces los culpables de las situaciones anómalas que pueden soportar en su vida. Y esto estaría evitado, si se les educa y se les abre los ojos en las cosas cotidianas en vez de centrarse en lo extraordinario.

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