martes, 26 de diciembre de 2017

SVEIN, EL DEL CABALLO BLANCO

The Pale Horseman (el título original en inglés, es una referencia a Apocalipsis 6. 8) es el segundo libro de la serie Sajones, Vikingos y Normandos que narra la vida de Uhtred, Señor de Bebbanburg, y su compleja relación con Alfredo el Grande, rey de Wessex en el siglo IX. La historia comienza el día después de los eventos descritos en Northumbria, el último reino y continúa describiendo el año fatídico en el que los daneses capturan el reino de Alfredo y lo empujan, como un fugitivo, a refugiarse en las marismas de Athelney. Parece que Wessex y el sueño de Inglaterra han sido destruídos, pero Alfredo está decidido a hacer una apuesta desesperada que podría salvar su reino...
En el momento en que el libro comienza, Uhtred se ha distanciado de sus amigos daneses, jugó un papel crucial en la batalla fundamental de Cynuit Hill (en la que las tropas británicas repelieron con éxito una gran incursión danesa) y ofreció sus servicios y su sagrado juramento a Alfredo. A partir de este momento, la historia personal de Uhtred, que incluye el matrimonio, la paternidad, las amargas rivalidades personales y la continua búsqueda para recuperar el feudo robado de su familia, se desarrolla paralelamente a la historia más amplia de la defensa de Wessex por parte de Alfredo. A través del punto de vista acrítico de Uhtred, presenciamos algunos de los momentos emblemáticos de una lucha histórica, incluida la violación por parte del rey danés Guthrum de una tregua formal, aunque incómoda, y su posterior ataque contra los sajones desprevenidos; la retirada de Alfredo a los pantanos del sur de Inglaterra, donde reconstruye su ejército y se prepara para la guerra, y la batalla culminante en Ethandun, donde los soldados de Alfredo, una vez más, derrotan a un ejército numéricamente superior de guerreros daneses entrenados. Uhtred también cuenta la famosa, y probablemente apócrifa, historia en la que Alfredo, fugitivo y disfrazado, es abofeteado por una campesina por permitir que sus pasteles de avena se quemen.
El resultado es un entretenimiento superior, a la vez que interesante y esclarecedor. Una vez más, Cornwell hace gala de un delicado equilibrio, construyendo con cuidado cada escena y poniendo una gran cantidad de detalles de apoyo, manteniendo la narración dinámica. Ya lo hemos comentado antes, pero vale la pena repetirlo: Las escenas de batalla de Cornwell (especialmente las ubicadas en la sangrienta línea del frente conocida como el muro de escudos) son excelentes. Entre los novelistas históricos contemporáneos, solo Steven Pressfield (Puertas de fuego) y quizá Christian Cameron, en su Sangre guerrera; ofrecen descripciones comparativamente vívidas del caos absoluto del combate cuerpo a cuerpo entre grandes masas de hombres.
Al igual que su predecesor, Svein, el del caballo blanco, ofrece un retrato sin barnices de un mundo en transición, que pasa del estado endémico de la Edad Media a la sociedad más cohesionada y civilizada que Alfredo y sus descendientes crearán gradualmente. Hasta esta entrega, la narración de Cornwell ha cubierto solo una pequeña parte de esta vasta empresa histórica, por lo que las memorias de Uhtred continuarán durante bastante tiempo.



2 comentarios:

  1. Esta novela me recuerda a otra que leí de vikingos titulada ASSUR, de Francisco Narla, en la que un jefe vikingo que antes ha sido esclavo, dirige expediciones contra Iberia e Inglaterra desde Vinland.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Esta mezcla personajes y hechos históricos con otros que no lo son, y lo hace muy bien y de forma amena.

      Eliminar