martes, 24 de enero de 2012

LOS CULPABLES

Mucho se habla de los culpables de la crisis en este mundo nuestro en el que hay que buscar culpables para todo y si es posible, que sea el vecino de enfrente.
A veces, además de culpables (que también), hay que saber reconocer errores y buscar soluciones. Todo ello, si fuere posible, debería ser acompañado de alguna medida (aunque fuera un detallito) para dar ejemplo.
Los políticos son muy dados a tirar de manual, se aprenden cantinelas que alguien escribe y les son distribuídas por el partido para que dominen el arte de salirse por los cerros de Úbeda, todo con tal de dar la impresión (que nadie se cree, por otra parte) de que ellos son como los Santos Inocentes, cuando en realidad son como Pilatos.
Últimamente han encontrado culpables a los que echar el muerto de la mala situación que vivimos. ¿Quienes son? ¿Los bancos? ¿Las instituciones públicas? No, son los que tienen un trabajo a quienes de manera subliminal se culpabiliza muchas veces, haciéndoles aparecer como unos privilegiados a los ojos de los demás, todo ello en una sutil maniobra para seguir cercenándoles la nómina a base de bien.
Vamos a ver, yo no digo que no haya que ser solidarios, todo lo contrario, debemos serlo, para que la cosa salga adelante, el que tiene dos, debe ser consciente de que debe compartir uno con el que nada posee. Aunque muchas veces sean necesarios esos dos para vivir y con sólo uno lo que se hace es malvivir.
Pero de ahí a señalarle con el dedo, como ya comienzan a hacerse algunas veces, sobre todo por quienes deberían tener un poco de tacto, va un trecho y más aún cuando quien da lecciones morales, lo que debería hacer es dar ejemplo y no lo da.
Nuestra clase política está aplicando recortes por doquier, probablemente necesarios por lo que vemos y oímos todos los días, pero ¿qué hacen ellos?, ¿cómo aleccionan al ciudadano? ¿dando ejemplo? Por desgracia, salvo contadas excepciones (que honran más a quienes dan un paso al frente), aplican las medidas más fáciles y siempre apuntando a otros.
¿No se dan cuenta de que el problema más grave es el paro y que los puestos de trabajo los generan las empresas? ¿Por qué no barren de un plumazo toda la burrocracia que ha de soportar cualquier emprendedor para poner en marcha su negocio? Además así se ahorrarían dependencias administrativas inútiles con su correspondiente dotación de personal.
Recortan plantillas, aumentan jornadas laborales a los funcionarios públicos ¿por qué no se reduce el número de diputados?, ¿para qué nos sirven, si al final van a votar lo que el partido les ordene? Y lo mismo podría decirse de un buen número de concejales, que sólo van a los plenos a votar y no tienen competencias.
Esto sin entrar en la consabida retahila de las visas, coches oficiales, despachos mastodónticos...
¿Y qué me dicen de los asesores? Los hay a miles. Pero si ya hay funcionarios cualificados que podrían desempeñar esas funciones, pero no, tienen que contratar a alguien de la cuerda porque, dicen, necesitan una persona de confianza. ¿Confianza para qué?, ¿para hacer chanchullos? Porque si tus actuaciones son transparentes con el funcionario de turno te vale, no necesitas meter a nadie de la familia. Huele mal.
¿Que todas esas cosas no arreglarían la crisis? Pero serían señales, como las carantoñas de la madre al niño que se ha caído, que te dan el ánimo suficiente para tirar p'alante.
Hace unos días, a la alcaldesa de mi ciudad le preguntaban los periodistas qué les diría a los funcionarios munipales a cuenta de la congelación salarial y ella, tan oronda, tiró de manual y no se le ocurre otra cosa que decir: Yo les diría que miraran a la cara a esos ciudadanos que están en el paro.
¡Para cara la suya!, como si no lo hicieran ya, cuando más de uno tendrá alguien en la familia que esté sufriendo estas miserias. Yo si fuera funcionario mucipal, le miraría a la cara a ella y le enseñaría los titulares de la prensa local del pasado mes de noviembre: Valdeón sube el sueldo un 35% a su asesor, que cobrará 9.000 euros más al año (La Opinión de Zamora)
Afortunadamente, la presión popular sirvió de algo y desde el propio PP obligaron a retirar la propuesta, no sin que la alcaldesa siguiera erre que erre defendiendo la procendencia de su propuesta. Señora, por favor, mire a la cara a esos ciudadanos que llevan en el paro desde hace meses, pero mírelos usted y deje de dar a los demás consejos que usted ignora, porque parece que se está riendo del prójimo.


12 comentarios:

  1. El problema radica en nuestra clase política, que es francamente patética.
    Los servidores públicos deberían ser profesionales de trayectoria contrastada, formación intelectual y afán de srvir y no de servirse.
    De ahí nacen todos los problemas.

    La kakistocracia -gobierno de los peores-, ha hecho que gente sin formación intelectual, medradores en el aparatchik del partido de turno, vividores de la cosa pública, ocupen puestos de responsabilidad y -lógicamente -, sus actuaciones deriven en fiascos, despilfarros y corrupción a granel.

    El mal, la raíz radica en ese bajo nivel -paupérrimo-, de nuestra clase política, salvo honrosas excepciones.

    Como ejemplo, comparen los curriculums del actual Gobierno con las Aido, Pajín,Maleni Álvarez,Pepiño y demás caterva.

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  2. Eso por un lado, Natalia y por otro, los que sí están preparados (mi alcaldesa -que no es que sea mía, claro- lo está de sobra), lo cagan todo (perdón por la expresión) con ese afán de querer justificar lo injustificable y dar a entender que siempre se equivocan otros. ¡Qué trabajo les cuesta reconocer errores! Por eso cada vez que encuentras alguno que dice: Me equivoqué, es noticia de primera página.

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  3. Tenemos un estado gigantes, que acaba con todos los recursos disponibles y que es un agujero negro del que nada escapa.

    Hace falta una ley de administraciones públicas completa, desarrollada, especifica e invulnerable por ninguna corporación o autonomía.

    Esta ley, tiene que garantizar el sueldo de los funcionarios en activo y su poder adquisitivo, con una regulación estricta y no negociable de su sueldo vinculada al IPC

    Además debe ir encaminada a la reducción del sector público, limitando los cargos públicos, sus atribuciones, duplicidades, incompatibilidades, posibilidades de contratación y disposición de dinero.

    Hay que enajenar del estado todas las posiciones inutiles, como empresas en sectores rentables que pueden regularse por el mercado, edificios mastodonticos inutiles de los que toda autonomía tiene al menos 10 y gestión de cualquier servicio cuya gestión pueda ser adjudicada en concurso

    Una vez que el estado este en su mínima expresión, entonces si, ya has hecho todo lo posible y puedes pedirme solidaridad. Y la solidaridad se pide, en referendum como mínimo, no puede exigirse.

    Es hora de dar paso a la libertad y responsabilidad individual, que el estado del bienestar es precioso para aquellos que no pueden defenderse de las situaciones en las que la vida les ha colocado, pero tenemos mucho bastardo viviendo de nosotros

    un abrazo

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  4. Culpa de todos un poco y de ellos mucha.

    Que den ejemplo y luego hablamos, pero como bien señalas el funcionario es el perfecto chivo expiatorio de todo el mundo, para unos porque es de donde primero echan mano y para otros por puro rencor social cuando vienen tan mal dadas, y si bien algunas críticas al sector son justas y fundadas, hay otras que no son de recibo y sólo nacen del desconocimiento o la envidia.
    Por ejemplo, qué culpa tendrán los funcionarios de que miles de curritos con un sueldo justísimo, se metieran a comprar pisos por bastante más de la mitad del sueldo...pero hay miles de ejemplos.

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  5. Muchos pero muchos políticos de éste país,no tienen ni el bachiller elemental que se decía antes. Podemos encontrar cientos y cientos de alcaldes y concejales que gobiernan en muchos pueblos y ciudades de España que no tienen preparación ninguna para estar al frente de una alcaldía. Como decía José María García los hay que no sirven ni para presidentes de escalera; pero bueno ahí están y así nos va. Pero en este país cualquiera que tenga morro, y la lengua suelta y larga ya es "apto para el servicio". Saludos Trecce.

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  6. Hola Trecce: No creo que sea bueno que se suban salarios en los momentos actuales.Pero si se hace y si se deja de lado esos principios éticos es porque cualquier político sabe que son los votos los que lo respaldan. En este caso eso parece.Yo no creo que sea una cuestión de falta de preparación académica,bastantes asesores tienen.No,no es eso, ahí está Lula da Silva y no tenía estudios,es una cuestión sobre todo de ética,de coherencia con los momentos actuales.
    Un saludo Trecce.

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  7. Estoy contigo, Sostrato, uno de los grandes problemas es la mastodóntica administración que tenemos, por eso señalaba yo que una de las cosas a hacer es reducir todas esas mandangas que agobian al ciudadano y que da toda la impresión de que sólo están pensadas para ocupar gente en papeleos inútiles.

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  8. Maribel, los listillos de nuestros dirigentes han encontrado a quien señalar y la gente se ha dejado llevar de ello. Al final nos acabaremos peleando, unos contra otros, todos los que ganamos malamente para llegar a fin de mes, mientras ellos siguen a lo suyo.

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  9. Si pagaran por ser presidente de escalera, verías tú, Rafa, como los partidos metían el cuezo. Ahí, como nadie puede trincar (aunque algún sinvergüenza siempre hay), no hay voluntarios.

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  10. Claudia, si consideran que los votos les respaldan para hacer lo que quieren (que muchos lo piensan así), y en las próximas elecciones volvemos a votar al mismo (como ha ocurrido aquí con los chorizos), es que algo no funciona en esta democracia.

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  11. No hay que dejar de dar nombres; La ínclita Isabel Carrasco, hace unas horas ha comentado algo sobre sus ingresos corriendo el famoso tupido velo. El señor Evaristo del Canto, presidente de Caja España-Duero-Etc se resiste a decir que gana al año 480.000 euros + incentivos. Que hace siete años se fue para la Caixa cobrando una indemnización de 1.200.000 euros (fíjense, ¡a la competencia con el riñón cubierto!) por despido improcedente y con esa "traición" en su currí-culo lo vuelven a fichar. Esto es la...

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  12. Lo de Isabel Carrasco, Manuel, es un no parar. Otra como Camps, ahora, con los 179,82 euros que pagó por potingues de belleza con la tarjeta de la Diputación, dirán sus correligionarios que eso no es nada que son cuatro euros, que peor es lo de los ERES. Vamos a ver, lo de los ERES está mal, nadie dice que no, pero esto otro está mal también y había que cargarse a todos estos tipos, a unos por chorizos, a otros por chulos y a otros por las dos cosas. ¡Sinvergüenzas!

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