Marta de Nevares Santoyo fue el último amor de Lope de Vega. Se conocieron hacia 1616 en un jardín madrileño con motivo de una reunión literaria cuando el poeta -ya ordenado sacerdote- rozaba los sesenta años y Marta apenas había cumplido los veinticinco. Así comenzó una larga, difícil y apasionada historia que duraría hasta 1632, año de la muerte de Marta. Fruto literario de esta relación son las Novelas a Marcia Leonarda.
Son cuatro narraciones breves, de temática amorosa y técnica de enredo, que mezclan verso y prosa: Las fortunas de Diana (incluida por primera vez en La Filomena, 1621), La desdicha por la honra, La prudente venganza y Guzmán el Bravo (incluidas en La Circe, 1624). Al final de la cuarta novela, Lope promete otra quinta, El pastor de Galatea, que anuncia para Laurel de Apolo, novela que no llegó a publicarse.
Lope las escribió por encargo, o al menos a petición de la propia Marta, no son nada del otro mundo y el propio autor reconoce que no tiene interés alguno por convertirse en novelista.
Una de esas novelas, la primera, es la titulada "Fortunas de Diana", en la que unos bellos y jóvenes protagonistas se ven envueltos en una cadena hilarante de aventuras que los lleva a paisajes exóticos y a experimentar sentimientos tan dispares como son el amor, el deseo, la seducción, la culpa, el honor y la venganza para finalmente llegar -tras un largo suspense- a un final feliz.
Hasta en sus obras teóricamente "menores" el Fénix de los Ingenios da pruebas de su absoluta maestría. Recuerdo, hace algunos años, la alegría que me produjo encontrar una edición de estas novelitas en una librería de viejo.
ResponderEliminarUn genio absoluto.
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