LA EXTRAÑA MUJER

 

Bangor (Maine), 1824. Jenny Hager (Hedy Lamarr) se siente por fin libre de su padre, un borracho, viéndose en disposición para casarse con un adinerado hombre de negocios local de mediana edad. Aunque a menudo utiliza su dinero para hacer el bien, sigue considerando a los hombres como un motivo de juego y entretenimiento.

Jenny pronto descubre que gracias a su deslumbrante belleza, puede manipular a los hombres a su antojo y es capaz de conseguir de ellos todo lo que se propone. No tardará en seducir al hijo de su marido con el único fin de inducirlo al asesinato de su padre. Al mismo tiempo, se encapricha del prometido de su mejor amiga.

El guión se basa en la novela del mismo título del prolífico autor norteamericano Ben Ames Williams. 

En realidad la película es la historia de Jenny, una mujer no demasiado bien tratada por la vida, pobre y con un padre alcohólico que no cuida de ella y que no ve otra salida que casarse con un hombre mucho mayor que ella con el que no es feliz. En realidad ella hubiera querido casarse con el hijo, pero cuando puede hacerlo, le repudia, acusándole de cobarde y de haber causado la muerte de su padre, algo que ella misma le había sugerido. Después contrae matrimonio con el prometido de su amiga, un hombre que trabajaba para su esposo y del que, esta vez sí, está profundamente enamorada. Pero Jenny tampoco es feliz, la frustración por no poder dar hijos a su marido y el sentimiento de culpa por haber arruinado la vida del hijo de su primer esposo, no dejan de agobiarla.

Es curiosa la personalidad de esta mujer, no es la típica mujer fatal, le agrada hacer el bien y ayudar a los más necesitados con el dinero de su marido, quizá recordando sus estrecheces durante la infancia, pero hay algo en ella que la convierte en una manipuladora y una mentirosa, algo que ya queda reflejado en la escena que abre la película con una Jenny aún niña.

El film lo tenía todo para haber sido un melodrama de primera, pero a pesar de esa cierta originalidad en la historia y de contar con la presencia de la cautivadora belleza de Hedy Lamarr y de un gran actor como George Sanders encabezando el cartel, no pasa de ser un film bastante normal, agradable de ver, pero sin llegar a ser la gran película que hubiera hecho las delicias de los amantes de este tipo de cine de romances trágicos.