martes, 14 de junio de 2011

RINCONES DE ZAMORA (EL CASTILLO)























El Castillo de Zamora, fue mandado construír por Fernando I (según algunos por Alfonso II), a medidados del siglo XI con el fin de asentar las conquistas realizadas hasta el momento y establecer en la línea del Duero la nueva frontera con los reinos musulmanes. De esta época apenas quedan restos, pues con posterioridad, al igual que ocurrió con la muralla, fue modificado.
El recinto es de planta romboidal y aprovecha la cota más alta del terreno, siendo la parte que da a la catedral y al resto de la ciudad, la más débil de defender y, por tanto, la más fortificada.
El acceso se realiza a través de unos jardines que hasta no hace mucho fueron bien hermosos y concurridos, ahora han perdido algo en beneficio de la vista del castillo y es que hace un par de años finalizó una importante intervención en la citada construcción que empezó con idea de adecentar aquello y fue tomando mayor envergadura a medida que comenzaron a encontrarse con que la cosa daba de sí más de lo que se pensaba.























Se removieron toneladas de tierra y se descubrieron parte de los originales basamentos, entre ellos los de varias torres defensivas que completaban las tres que se conocían, una capilla, un pozo e incluso vestigios que se remontan a la edad de bronce.
En total más de siete millones y medio de euros, procedentes de fondos europeos que se han gastado en tres años y, por una vez, yo creo que bien gastados.
El castillo, que presentaba un aspecto bastante deplorable, sucio, víctima de una absoluta dejadez, ha recuperado parte de su antiguo esplendor, se ha recuperado la liza, tras limpiar el foso, la parte alta de los muros es ahora visitable, se ha limpiado, reparado y adecentado el conjunto y se han instalado pasarelas de madera y habilitado caminos de grava o de losas de granito, para poder recorrerlo. Podrá gustar más o menos, pero está muchísimo mejor que estaba, de hecho, muchos zamoranos han "descubierto" su castillo tras unos trabajos dignos de encomio y realizados con criterio.
Los jardines que anteceden a la fortaleza han perdido parte de su encanto en aras de no interrupir la vista del conjunto desde el exterior. Bueno, todo no se puede tener y si algún día se decide cambiar siempre será más fácil plantar árboles o rediseñar los jardines que acometer otra obra.
Además, en la llamada Casa de los Gigantes que antecede a los jardines, se ha instalado, bien que de forma provisional, una exposición con parte de las obras del escultor Baltasar Lobo, con el fin de que el visitante tenga, sin necesidad de desplazarse,la posibilidad de visitar algunas de las muchas joyas que atesora la ciudad: La Catedral, El Castillo y el Museo de Lobo. Por cierto, algunas obras del escultor de Cerecinos de Campos, decoran los jardines e incluso el interior del castillo.
En general, la obra ha quedado muy digna, habiendo ganado mucho en cuanto a estética, el resultado se puede calificar de satisfactorio y recomiendo su visita a propios y forasteros, no quedarán defraudados.




6 comentarios:

  1. Pillada la recomendación, y si por Zamora, la bien cercada, vamos, allá que nos dejaremos caer... y por más de una hora.
    Saludos blogueros

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  2. Hay tantos lugares hermosos que uno necesitaría muuuuchas vidas para poder visitar algunos de ellos.

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  3. Hace unos años que estuve por esos parajes, y son muy bonitos. En España tenemos castillos, fortalezas y monumentos en general que son unas maravillas, y a veces la gente se deshace en elogios de lo que ve en otros países, cuando en muchos casos no ha visto la preciosidad que tiene a escasos kilómetros de su ciudad. Saludos Trecce.

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  4. Tienes toda la razón, Rafa, no hace faqlta ir demasiado lejos para contemplar auténticas maravillas.

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  5. No tengo el gusto, es uno de los bastantes sitios pendientes, pero lo que he visto me encanta...

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