Camila (Lali Espósito) y Mateo (Martín Piroyansky) son novios desde hace ocho años, se quieren y viven juntos. Una noche, cenando con una pareja amiga, surge el tema de los «permitidos». Cada uno menciona un elegido famoso con quien tendría permiso para una noche de amor, algo imposible en la vida real. Días más tarde, accidentalmente, Mateo conoce a su permitida. Pero lo mejor que le pasó en la vida puede convertirse en todo lo contrario.
Comedia que, seguramente, arrancará alguna carcajada a los más proclives, tras un comienzo más o menos prometedor, la película avanza a trompicones con chistes sin demasiada gracia y algunas escenas demasiado alargadas, cuando no directamente evitables y momentos en los que los intérpretes sobreactúan.
De correcta factura técnica, a pesar de las opiniones tibias de la crítica tras su estreno, la película de Ariel Winograd se convirtió en una de las producciones más vistas en Argentina en 2016.
Lo suficientemente entretenida como para pasar el rato, supongo.
ResponderEliminarPoco más.
EliminarTras ver tu texto, me parece que me voy a permitir prescindir tal obra de arte. Al fin y al cabo, tus críticas también sirven para evitar perder el tiempo. Gracias.
ResponderEliminarYa lo pierdo yo por los dos.
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