miércoles, 28 de septiembre de 2016

EL PRÍNCIPE DE LAS MAREAS

La infancia de Tom Wingo (Nick Nolte) transcurre entre los malos tratos de su padre, que pierde el control de vez en cuando y, sin razón aparente, la emprende a golpes con su familia cuando menos se lo espera, hasta el punto de llegar a hacer verdadero daño tanto a su esposa como a sus tres hijos.
Pasados los años y ya casado y con tres hijas, recibe la visita de su madre, con la que no se lleva demasiado bien, a instancias de la cual, Tom decide ir a Nueva York a entrevistarse con la psiquiatra de su hermana Savannah (Melinda Dillon), que acaba de intentar suicidarse una vez más. Cuando toma esa decisión, Tom no espera que su vida se va a convertir en una auténtica ruina a medida que se suceden los acontecimientos, su mujer le confiesa que tiene un amante y que se plantea la separación y, para colmo, cuando llega a una ciudad a la que odia profundamente, se encuentra con que es él quién habrá de entrevistarse prácticamente a diario con Susan Lowenstein (Barbra Streisand), la psiquiatra que intenta poner algo de claridad en las oscuras tinieblas que nublan la cabeza de Savannah .
Tom hará de la terapia de su hermana con Lowenstein, una terapia para sí mismo, pues al contarle a ella toda su vida, abrirá las dolorosas puertas que creía tener cerradas a cal y canto en lo más profundo de su ser.


El guión se basa en el best seller del mismo título de Pat Conray, en el que hablaba de forma novelada de su torturada infancia, víctima de un padre sádico que había machacado la existencia de su esposa y de sus siete hijos. Conray era hijo de un piloto de los marines que infligía castigos físicos a sus hijos, abusaba de su mujer y había implantado en su hogar una disciplina militar.


Buena mano la que tuvo Barbra Streisand para dirigir este film después del éxito que había obtenido con Yentl, cuenta con una estupenda banda sonora y unas actuaciones de sobresaliente, de hecho Nick Nolte hace la que para algunos es la mejor representación de su carrera. Y para acabar de rematarlo, una preciosa fotografía que tiene escenas realmente espectaculares.
Streisand, además, interpreta a la protagonista femenina del film y sabe hacerlo con mesura, sin abusar de su posición dominante en el film del que también era productora, demostrando que, si es un verdadero mito de la canción y una excelente actriz, creo que como realizadora exhibe una capacidad que no desmerece en absoluto.


La película adapta bastante bien la novela de Conray, un trabajo nada fácil, pues los asuntos que trata dan para perderse en cada uno de ellos: la violencia doméstica, los traumas infantiles, la infidelidad, el suicidio... y todo ello tratado con elegancia y con absoluta ausencia de morbo.
Un gran melodrama con muchos pasajes de tinte romántico que, aunque no obtuvo ninguno, estuvo nominado, nada menos, que a ocho Oscar.
Un par de anécdotas para concluír, el papel de Sally Wingo, la esposa del protagonista, lo encarna Blythe Danner, que es la mamá de Gwyneth Paltrow y el del hijo de la psiquiatra, lo interpreta Jason Gould, hijo de Barbra Streisand en la vida real.




2 comentarios:

  1. Se enfrentó en los Oscar a "El silencio de los corderos"... tuvo mala suerte. Una gran época del cine con "contenido" y no solamente con efectos visuales e informáticos como la mayoría del que tenemos ahora... y con mucha más variedad, los primeros 90 fueron una gran época de cine. Por poner un dato, Oscar a la mejor película, 1990-Bailando con lobos 1991-El Silencio de los corderos, 1992-Sin Perdón, 1993-La lista de Schindler, 1994-Forrest Gump, 1995-BraveHeart... clásicos en su genero, ¿Será porque nos hacemos mayores? Estas las vi todas en su momento, de las 6 últimas solo he visto 1, y en general me parecen más de cine para cinéfilos que para el público, al contrario que las de los 90.

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