miércoles, 7 de mayo de 2014

ALEJANDRO MAGNO

Filipo II de Macedonia (Val Kilmer), consigue transformar a las tribus de pastores macedonias en tropas adiestradas y preparadas para la guerra, bajo su mandato, los diversos pueblos de Grecia se sometieron a su mandato. Filipo tiene un hijo, Alejandro (Colin Farrell), al que, desde pequeño, va preparando para reinar, proporcionándole experiencia militar y encomendando a Aristóteles (Christopher Plummer) su formación intelectual. Aunque las relaciones entre padre e hijo no siempre son cordiales, cuando Filipo es asesinado, Alejandro es reconocido como rey de Macedonia y ha de dedicar los primeros años de su gobierno a imponer su autoridad sobre los pueblos sometidos a Macedonia que habían aprovechado la muerte de su padre para rebelarse.
En el 334 a. C. lanzó a su ejército contra el poderoso y extenso Imperio Persa, iniciando así la empresa que su padre no había podido poner en práctica. Alejandro cruza el Helesponto hacia Asia Menor, derrotando a Dario III (Raz Degan) en la batalla de Gaugamela, consiguiendo extender sus dominios por la Hélade, Egipto, Anatolia, Oriente Próximo y Asia Central hasta los ríos Indo y Oxus, internándose en la India, pero ante la negativa de sus tropas a continuar, ha de regresar a Babilonia.


Inmenso proyecto de Oliver Stone que llevaba acariciando desde hacía mucho tiempo, quien aprovecha sus anteriores éxitos y el auge que tomaron en ese momento filmes de este corte, para sacar adelante esta especie de sueño que bullía en su cabeza.


La película se mueve en dos planos diferentes, por un lado lo que podríamos llamar hechos reales, las batallas, las conquistas de Alejandro, su vida en Macedonia, es decir, lo que nos cuenta la Historia y, por otro, el retrato psicológico del hombre, su evolución como persona. Para el primero de los asuntos, el film trata de reproducir esos acontecimientos, el avance de su ejército, sus amores, la vida en los campamentos y la larga marcha con todos sus éxitos y fracasos; mientras para esa especie de buceo psicológico, utiliza imágenes oníricas: el vuelo de las águilas, las serpientes, esa imagen recurrente de Alejandro mirando al sol que se repite en las estatuas que se hicieron de él, juegos de luces y sombras...


Quiza el principal inconveniente del film sea su ritmo irregular, como descompensado, con algunas secuencias espléndidas y buenas reconstrucciones de las batallas, pero en otros momentos parece perder un poco de brío, aunque hay que advertir que la épica no es el principal ingrediente del guión.


Un par de años después, invirtiendo parte de los beneficios que las ventas del film en DVD habían generado, Stone estrenó "Alexander Revisited: The Final Cut", que no es una versión extendida al uso, sino un nuevo montaje. De hecho, en "Alexander", los hechos transcurren de manera lineal, se nos cuenta la infancia y juventud del protagonista y después sus conquistas con la voz en off de Tolomeo (Anthony Hopkins) sirviéndonos de guía, mientras en este "The final Cut", esas circunstancias anteriores a su aventura asiática, se nos narran por medio de flashbacks, algunos de ellos largos.


Un buen intento, del que quizá se esperaba más de lo que nos ofrece, quizá porque el film tiene mucho de visión personal del realizador, que no se contenta con una narración sucesiva de aventuras, de hechos de armas, sino que intenta profundizar en otros aspectos, como el empeño de Alejandro en el intercambio cultural y humano con los pueblos conquistados. Tal vez por eso a quienes esperan una película de acción se les haga un poco larga.





12 comentarios:

  1. Y creo que fue todo un acierto que Oliver Stone realizara esta película para mi francamente extraordinaria. Además que estos son temas que tienen mucho campo a los que se puede sacar mucho partido

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  2. Me sobra Angelina Jolie... no me cuadra como la madre de Alejandro. Por lo demás me parece bastante conseguida.

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    1. A mucha gente le sobra Angelina. Yo creo que Stone pretendió dar al personaje un aire sensual, de hechicera o algo parecido y cargó las tintas en ese aspecto.

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  3. No tenía ni idea de esa peli porque hace años que no voy al cine, pero tal como la expones me atrae, porque el personaje, si se refleja la realidad histórica fielmente, es extraordinario.

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    1. Como es lógico quedan muchas cosas en el tintero y además Stone va mucho más allá de los hechos puramente históricos, aunque está muy bien documentada.

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  4. Angelina Jolie como Olimpíade está muy convincente, con esa pugna por el poder con Filipo/Val Kilmer... La película es excelente tanto en guión (la versión 'Revisited' lo realza, y a ver qué han hecho con el montaje "refinitivo", 'The Ultimate Cut', que se estrena en DVD en junio; ambos montajes imposibles de encontrar en España, hay que acudir a Amazon) como en recreación histórico (dejaremos a un lado el exotismo oriental en Babilonia) y la música de Vangelis. Una película denostada con argumentos a menudo ridículos (el pelo rubio de Colin Farrell, por ejemplo) pero que se reivindica con el tiempo y se deja ver muy pero que muy agradablemenet en cada revisionado.

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    1. Estoy contigo, a medida que uno la repasa, descubre más cosas.

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    2. Lo que pasa Farsalia es que Angelina te pierde. ;-P

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    3. A mí me pierde la película, que me parece una maravilla... :-P

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  5. En su estreno la pazguata sociedad norteamericana (tan ridículamente puritana) puso el grito en el cielo por la "sesgada" visión del personaje histórico. Ni el propio Stone puede sacar adelante limpiamente sus ideas en una coproducción de gran complejidad, creo que se plego al reparto que no era de su entera satisfacción.

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  6. De hecho esa versión estrenada no era la que él quería.

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