martes, 27 de enero de 2015

LA BUENAVENTURA

Parrón es un sanguinario bandido que tiene aterrorizados a los pobladores de los alrededores de Granada. Toda persona que caía en manos de la partida de Parrón, firmaba su sentencia de muerte, pues el bandolero mantenía la teoría de que nadie que hubiera visto su rostro debía permanecer con vida para contarlo.
Un buen día, los bandidos apresan a un tal Heredia, un viejo gitano que apenas lleva tres duros y siete reales y un borrico sin aparejos. Cuando Heredia es llevado a presencia de Parrón, comienza a hacerle zalemas y a decirle que estaba deseando verle para echarle la buenaventura. La actitud del calé hace gracia a Parrón que no puede por menos que reírse ante la aparente falta de miedo del prisionero (aunque la procesión iba por dentro) y le urge a que le lea su futuro.
Heredia hace una rápida composición de lugar, da por hecho que Parrón le va a perdonar la vida y le va dejar marchar, piensa ir de inmediato a denunciarle a las autoridades que tienen puesto precio a su cabeza, como quiera que le ha visto y sabe donde está su escondite, calcula que no tardarán mucho en encontrarle, le juzgarán con rapidez y le mandarán a la horca, así que le dice a Parrón: En el plazo de un mes, morirás.
Pero Parrón, en lugar de soltarle le retiene y le dice que si se cumple la profecía, quedará libre, de lo contrario, será Heredia quien pierda la vida.
Por una serie de circunstancias afortunadas para el gitano, logra escapar y pide una entrevista con el Capitán General de Granada, el Excmo. Sr. D. Eugenio Portocarrero, conde de Montijo.
La captura del bandido se producirá de una forma totalmente inesperada.




2 comentarios:

  1. Aun recuerdo de cuando yo era un chiquillo -hace ya muchos años- los gitanos frecuentaban mi pueblo y las gitanas se dedicaban a echar la buenaventura a las mujeres, entreteniéndolas, y mientras tanto otros gitanos casi siempre lograban robar alguna gallina. ¡Que tiempos aquellos!

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    1. Como rezaba un dicho gitano: Lo que hay que trebajá pa no trebajá,

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