martes, 30 de enero de 2024

UN MARIDO RICO

 


El matrimonio de Gerry (Claudette Colbert) y Tom Jeffers (Joel McCrea) atraviesa por una situación complicada. Tom es arquitecto y se dedica a idear diseños innovadores, sin encontrar inversores que le respalden. Están a punto de ser expulsados de su apartamento cuando Gerry conoce por casualidad a un rico hombre que se dedica al negocio de las salchichas y que visita el apartamento como posible comprador del mismo, aunque Gerry y Tom aún no han sido desalojados, y al enterarse de la situación de la joven, le da 700 dólares para que se ponga al día con sus deudas. Cuando se lo cuenta a Tom, se niega a creer su historia y se pelean. Gerry decide que su matrimonio ha terminado y se dirige a Palm Beach para obtener un divorcio rápido. En el viaje conoce a John D. Hackensacker III (Rudy Vallee), heredero de una de las mayores fortunas del país, que se enamora de Gerry, pero Tom tiene planes para hacer fracasar la aventura de la que aún es su esposa.


Con guion y dirección de Preston Sturges, es tenida por una de las mejores comedias del género conocido como screwball. La película acude a algunos de los estereotipos del género: caídas, persecuciones alocadas, situaciones equívocas, frases de doble sentido y, cómo no, diálogos ingeniosos y punzantes.


Pero también rompe con algunos de esos estereotipos, aquí, por ejemplo, los protagonistas no son un matrimonio rico, sino una pareja de clase media con dificultades económicas, aunque ello no impide que la acción se desarrolle en un ambiente de sofisticación y prosperidad y en entornos que expresan tal situación debido a las personas que conocen y a que la esposa tratará de sacar partido de tales amistades. 
Precisamente la resistencia del marido a tales manejos desagrada a Gerry, que no ve inconveniente en aprovechar la debilidad de los hombres y no pone reparos en utilizar sus encantos para tratar de ayudar a su marido en sus propósitos consiguiendo financiación para sus proyectos, aunque a cambio haya de soportar a los "moscones" a su alrededor. Se pone en cuestión lo relativo a los géneros, ya que los personajes femeninos llevan la voz cantante y dan la impresión de ser mucho más desenvueltos y decididos que sus partenaires masculinos. 
Bajo el aspecto cómico de la historia, está presente una despiadada crítica a las clases altas, poniendo de relieve sus manías y caprichos y ridiculizando su afán por parecer siempre por encima de los menos afortunados. 
Momentos divertidos para un film en el que todo gira alrededor del personaje de Claudette Colbert, toda una estrella en aquellos años y a cuya mayor gloria Sturges concibió esta disparatada comedia.




4 comentarios:

  1. Claro: tratándose de Preston Sturges no podía faltar ese fondo crítico e inteligente en una historia aparentemente cómica.

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  2. Una comedia brillante, ligera, sorpresiva y alocada, pero sabiamente medida en su aparente insensatez. La agudeza e intencionalidad de su afilado humor, el ritmo frenético de la narración y las magníficas composiciones del reparto al completo, consiguen que esta película resulte una feliz y enriquecedora experiencia.

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