martes, 18 de junio de 2019

LOS ESTRAGOS DE SHARPE

Corre el año 1809 cuando encontramos al teniente Sharpe con su pequeño grupo de hombres en una situación bastante precaria en tierras del norte de Portugal.
Sharpe es enviado al rescate de Kate Savage, de 19 años, hija de un rico bodeguero inglés ya fallecido, que vive con su madre y que ha escapado a la casa de verano de la familia justo cuando las tropas del mariscal Soult se disponen a conquistar Oporto y toda la población huye del ejército francés.
Sharpe deberá por tanto, atravesar las líneas enemigas y dirigirse hacia la retaguardia francesa, pero tiene al sargento Patrick Harper y a sus fusileros y cuenta con la ayuda de un joven portugués un tanto idealista, el teniente Jorge Vicente, al frente de un pequeño destacamento del ejército portugués. Juntos, tienen que encontrar a la chica desaparecida y librarse de los enredos del coronel Christopher, un misterioso inglés que trabaja para el ministerio de exteriores y que tiene sus propias ideas sobre cómo los franceses pueden ser expulsados ​​de Portugal. Esas ideas son tan fantásticas como peligrosas, pero los franceses están desenfrenados, Lisboa está amenazada y Christopher ve a Sharpe y sus fusileros como los únicos obstáculos para sus sutiles planes.
Cuando el avance de Soult parece imparable, un nuevo comandante del ejército británico llega a Lisboa, Sir Arthur Wellesley, y justo cuando Sharpe y sus hombres parecen condenados, Sir Arthur organiza su propio contraataque, una operación que enviará al ejército francés a las montañas del norte. Sharpe se convierte en cazador en vez de cazado y ejercerá una terrible venganza contra los hombres que han estado a punto de acabar con su vida a base de traiciones. Los estragos de Sharpe es una historia clásica del famoso personaje inventado por Bernard Corwell, un recorrido por el norte de Portugal en compañía del Sargento Patrick Harper, el Capitán Hogan y sus queridos Greenjackets, los fusileros del 95º de rifles.
De nuevo el autor británico, con su habilidad para mezclar ficción y hechos históricos, nos deleita con su prosa y con su peculiar manera de contarnos la historia que nos obliga a ir pasando las páginas del libro sin darnos apenas tregua, llevándonos del desastre del hundimiento del puente de barcas en Oporto, que supuso la muerte de cientos de personas, la mayoría civiles, como atestigua la placa, en el muelle cercano a donde el magnífico puente de hierro de Eiffel cruza hoy el Duero, que rinde cuenta de los horrores del 29 de marzo, cuando los refugiados portugueses se agolparon en el mencionado puente de barcas, hasta la respuesta de Wellington, que reconquistó la capital del norte portugués, gracias a que un barbero local, cruzó el río en un esquife y avisó a los británicos de que los franceses habían olvidado hundir tres barcazas en el lado norte del río, en las que fueron cruzando las tropas inglesas, un hecho que Cornwell hace protagonizar a Sharpe y los suyos, cambiando un poco la historia, en la que también relata la conquista del seminario, en una brillante recreación de lo que debió ser aquella ardorosa batalla.
Sharpe y los suyos, avanzarán por delante de las tropas británicas, hasta llegar a los puentes de Ponte Nova y El Saltador, en pos de rescatar a la joven británica, mientras las tropas francesas tratan de huir hacia el norte.
En definitiva, otra aventura más de Sharpe, llena de tensión, acción y sus gotas de humor, que hará las delicias no solo de los aficionados a la novela histórica.



No hay comentarios:

Publicar un comentario