jueves, 14 de septiembre de 2023

FUGITIVOS

 


John "Joker" Jackson (Tony Curtis) y Noah Cullen (Sidney Poitier), son trasladados, junto a otros presos, en un furgón, cuando este sufre un accidente, ambos escapan encadenados entre sí. Se odian, pero necesitan ayudarse mutuamente para alcanzar su intento de subirse a un tren que los lleve al norte. Perseguidos por la partida organizada por el sheriff Max Muller (Theodore Bikel), que tratará de que se respete la Ley y aquello no se convierta en una cacería humana, "Joker" y Cullen llegan a una granja habitada por una mujer y su hijo Billy (Kevin Coughlin), ella les ayuda a liberarse de sus cadenas, ofreciéndose a llevar a "Joker" en su auto hacia el sur, mientras Cullen escapa a través de los pantanos, pero "Joker" se entera de que la mujer ha enviado a su compañero de fuga a una trampa.


Buenos diálogos y no menos brillantes interpretaciones para este excepcional drama sobre fugas que se convierte en una crítica sobre las barreras raciales. Además de ello, Kramer reflexiona sobre determinados aspectos de la convivencia humana, el odio y el rechazo por el diferente, quedan superados cuando cuando los problemas comunes afloran, una demostración de que, en ocasiones, es la desgracia la que ayuda a superar los prejuicios y las diferencias.


Nominada a nueve premios de la Academia, incluida la de Mejor Película, The Defiant Ones de Stanley Kramer abrió nuevos caminos al transmitir su mensaje de tolerancia racial a través de una mezcla de acción y suspense. Sigue siendo una película cruda y poderosa, tan emocionante como conmovedora.




4 comentarios:

  1. Pues no han cambiado tanto las cosas. ¿Llegará algún día en que las tensiones raciales dejen de ser un tema recurrente en EE.UU.?

    ResponderEliminar
  2. Sabemos que el cine de Stanley Kramer lleva siempre incorporado el "mensaje" y la "moral". En esta ocasión vino a decirnos que si los hombres intentaran conocerse mejor los unos a los otros, desaparecerían los odios y los prejuicios raciales o de cualquier otro tipo. Si sobre el papel, el enunciado puede resultar algo simple, la puesta en escena por el contrario estuvo concienzudamente trabajada y sus imágenes poseen la fuerza de un vibrante relato de acción en el que cabe destacar algunas secuencias memorables como la penosa odisea de los dos protagonistas en el pozo de barro, o el peligroso vadeo del torrente, además de unos magníficos (y esforzados) trabajos interpretativos a cargo de un insólito Tony Curtis con nariz postiza y el emblemático actor de color Sidney Poitier.

    ResponderEliminar