martes, 17 de diciembre de 2013

WERTHER

La novela está compuesta por las cartas que le envía el joven Werther a su amigo Wilhelm en las que le cuenta cómo se va enamorando de una señorita llamada Charlotte.
Pero Charlotte está comprometida con un tal Albert, un buen hombre. Eso desespera a nuestro protagonista al punto que decide suicidarse, y lo hace. Tal es la trama de la novela. Parece simple, lo es. Pero hay algo más, algo profundo, hipnótico, macabro e incitador en esa historia.
Fue uno de los primeros fenómenos literarios de la historia. Aparte de convertir a Werther en una auténtica celebridad, provocó algo parecido a una enfermedad mortal entre los jóvenes. Tras leer “Los sufrimientos del joven Werther” (el otro título por el que también es conocida la novela), en el siglo XIX la gente se deprimía, sobre todo los adolescentes comenzaban a sentir hastío, aburrimiento, depresión; a pensar en la inutilidad que representa estar vivos, a considerar el suicidio y a consumarlo. Se calcula que dos mil jóvenes se quitaron la vida como consecuencia más o menos directa de la lectura de la novela.
Goethe lamentaba en su vejez seguir siendo famoso por ese libro de su juventud, y que la gente no valorase tanto otras obras fundamentales de su madurez como la primera parte del Fausto.
El hecho es que el fantasma del joven Werther le persiguió siempre como si se tratara de un hermano al que asesinó en la adolescencia.





2 comentarios:

  1. Hace muchísimo que lo leí. De hecho me estoy replanteando un repaso.

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  2. Yo con esta, creo que tengo suficiente, aunque más adelante, nunca se sabe.

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