viernes, 20 de septiembre de 2019

DOBLE CUERPO

Durante la filmación de una escena en un ataúd para una película erótica sobre vampiros, el actor Jake Scully (Craig Wasson), descubre que padece claustrofobia. A pesar de que está determinado a superarla, no solo para esta película, sino también para su vida cotidiana, Rubin (Dennis Franz), el director del film, lo despide, argumentando que no puede permitirse los retrasos que la recuperación de Jake ocasionaría.
Pero la mala suerte del actor no acaba ahí, pues ese mismo día, descubre que su novia, Carol (Barbara Crampton), le está engañando, sin que el hubiera sospechado nada al respecto. Debido a ello, tiene que trasladarse de domicilio, yendo a casa de un amigo que le ofrece temporalmente el sofá de su salón. Durante una prueba para interpretar personajes de Shakespeare, un antiguo compañero de profesión le presenta a otro actor, Sam (Gregg Henry) que, al enterarse de la situación de Jake, le ofrece ocupar la lujosa mansión en que vive y que, a su vez, es propiedad de otro amigo, con la única obligación de cuidar y regar las plantas diariamente, ya que él estará cinco semanas ausente de la ciudad para participar en un rodaje. Mientras le enseña la casa, le muestra a través del objetivo de un telescopio a su hermosa vecina del otro lado del valle, en cuya no menos lujosa casa realiza un sensual striptease todas las noches a la misma hora.
Jake acaba por obsesionarse con la chica, primero en sentido romántico, pero más tarde se despierta en él un sentimiento de protección desde que observa que tiene algunos problemas en su vida que incluyen a un hombre que la somete a malos tratos y a otro que la acecha, probablemente para robar.
Gloria (Deborah Shelton) que así se llama esta mujer, acabará siendo asesinada, con Jake como único testigo, por lo que se verá involucrado en la investigación criminal, que se complica aún más con su claustrofobia.


De nuevo Brian De Palma, jugando a ser Hitchcock o, tal vez, emulando, copiando u homenajeando al maestro. Elijan el término que prefieran, porque opiniones sobre este tipo de filmes de De Palma, hay para todos los gustos.
Referencias claras al rey del misterio las hay por doquier. Todo el mundo se refiere a las más evidentes: La ventana indiscreta o Vértigo, pero esas son únicamente la fachada, porque en las que verdaderamente se inspira son, a mi modo de ver Con la muerte en los talones o El hombre que sabía demasiado.


La verdad es que algunos momentos, la historia parece bastante tontorrona y el protagonista de este "sexpenser", como llaman los americanos a este tipo de películas, da la imagen de un ingenuo desesperante por su propia candidez que le hace parecer tonto. Es cierto que algunos personajes de Hitchcock también daban una imagen semejante, pero claro, hablamos de verdaderos mitos que con su presencia y la brillantez de sus interpretaciones, llenaban la pantalla y este no es el caso.
De cualquier forma, parece que a Brian de Palma no le importa demasiado concederse ciertas licencias y acudir descaradamente al señuelo del erotismo para ofrecernos un film con bastantes altibajos, con secuencias un tanto sonrojantes mezcladas con otras de innegable calidad técnica y de gran altura artística y que logra atraparte con la intriga de saber qué pasa y en qué acabará todo.




2 comentarios:

  1. No parece una historia muy creíble con tantos elementos que parecen apelmazados más que unidos.

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    1. Hay momentos en los que, en efecto, parece bastante increíble.
      Claro que para increíbles, las cosas que nos ofrece de vez en cuando la propia realidad.

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