Cuando en 1529 las tropas de Soleimán el Magnífico llegaron a las puertas de Viena, el ejército otomano se las prometía muy felices y su jefe, se veía como emperador de Europa.
Sin embargo, la perseverancia del viejo Nikolás Salm, jefe de la guarnición de la ciudad, con la ayuda inestimable de los lansquenetes germanos y los arcabuceros españoles, darían al traste con las pretensiones del invasor.
En este contexto, Robert E. Howard, coloca a su personaje Sonya de Rogantino, una muchacha de origen ruso, llamada La Roja por el color de su pelo.
Sonia (unas veces escrito con "i" y otras con "y", dependiendo de la edición), es hermana de Roxana, la amante de Soleimán, que fue vendida como esclava y acabó en el harén del sultán, ejerciendo una poderosa influencia sobre él, por lo que su hermana le guarda un odio mortal.
Sonya es una guerrera temible a la vez que una atractiva mujer y su actitud combativa le ha procurado el respeto de sus camaradas masculinos.
La novela, como tantos otros relatos de Howard, tiene un ritmo trepidante, en el que los combates y las intrigas se suceden y alternan sin descanso para el lector, lo que hace del texto una lectura agradable y entretenida para los amantes de la acción sin pausa, con personajes que son belicosos, fuertes, despiadados, sanguinarios incluso y especialmente dotados para la lucha. Además, la capacidad narrativa del autor, en este caso se ve acompañada por el conocimiento histórico que demuestra, más que fantasía épica, como los relatos de Conan, cabría calificar la novela de fantasía histórica, pues no utiliza elementos sobrenaturales.
Durante el asedio, Sonya combatirá codo a codo con Gottfried von Kalmbach, un caballero germano que lo que tiene de poderoso físicamente, lo tiene de borrachín, por lo que ella se convertirá en su ángel guardián y, de hecho, le salvará la cabeza, a la que ha puesto precio el propio Soleimán que le tiene jurada venganza desde que recibió una herida del teutón en la batalla de Mohács, donce fue derrotado el joven rey Luis II de Hungría, a manos del ejército otomano.
Después de haberme tragado El libro de Saladino de Tariq Ali, no me vendría mal leerme algo donde den pal pelo a los tatarabuelos del Estado Islámico.
ResponderEliminarAl fin y al cabo, adornado con una historia inventada, no cuenta sino lo que ocurrió: que se fueron con el rabo entre las piernas y que Saladino estuvo tomando el pelo a sus súbditos haciéndoles creer que había ganado y celebrando grandes fastos por la victoria que él se había inventado.
EliminarY tal y cómo estaba el patio, cualquiera le llevaba la contraria.
Sonia la Roja es una obra característica de este autor norteamericano. Para Robert E. Howard, los problemas dejan de ser problemas.si tratamos de solucionarlos aplicando la violencia. Una novela muy entretenida
ResponderEliminarSe lee muy bien.
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