DÍAS SALVAJES (DAYS OF BEING WILD)

 

Yuddy (Leslie Cheung), un joven atractivo y seductor, descubre que la prostituta alcohólica que le ha criado no es su verdadera madre y que además se niega a revelar la identidad de ésta en la esperanza de poder retenerlo a su lado, prefiere que la odie a que la olvide. Dos mujeres tienen la mala suerte de enamorarse de Yuddy: Una chica llamada Su Lizhen (Maggie Cheung) que trabaja en un estadio deportivo, mientras que la otra es una corista deslumbrante cuyo nombre artístico es Mimi (Carina Lau). Quizás debido a sus problemas edípicos no resueltos, deja que los dos compitan por él, sin poder o sin querer tomar una decisión. Mientras Lizhen le confía su frustración a un policía llamado Tide (Andy Lau), que se enamora de ella. Lo mismo ocurre con Zeb (Jacky Cheung), el amigo de Yuddy, que se enamora de Mimi. Más tarde, Yuddy se entera del paradero de su madre biológica y se dirige a Filipinas.

Escrita y dirigida por Wong Kar-Wai, Days of Being Wild es la historia de un playboy que intenta encontrar su identidad mientras lidia con sus propios enredos románticos, en tanto que de las dos mujeres, una trata de olvidarlo y la otra le sigue de manera obsesiva. 

La película es la primera parte de una trilogía a la que seguirían In the Mood for Love de 2000 y 2046 de 2004, que explora la idea del amor y la soledad ambientada en el Hong Kong de los años 60.

El protagonista va de mujer en mujer sin encontrar remedio a su soledad y negándose a cualquier tipo de compromiso, su manera de vivir la vida queda muy bien expresada cuando le oímos hablar de un ave que vuela constantemente y solo se posa cuando va a morir. 

Atractiva y hermosa, con una banda sonora que incluye cortes de temas latinos como Perfidia o Siboney, entre otros (algunos interpretados por la orquesta de Xabier Cugat), el film habla sobre el amor, la soledad, el rechazo y el camino de la vida de una forma que, en muchos momentos, tiene algo de poética.