Harry Ross (Paul Newman), un detective privado ya retirado, se presta a ayudar a sus amigos, el actor Jack Ames (Gene Hackman), que se está muriendo de cáncer y su esposa, la actriz Catherine (Susan Sarandon), que están en apuros, pero inmediatamente se verá envuelto en una peligrosa y complicada intriga criminal.
La historia se ve desbordada por los personajes, tal vez por la endeblez del guión o porque los actores dotan a sus personajes de un nivel del que la película carece. No en vano estamos hablando de grandes nombres de la escena cinematográfica y es que estos tipos (y tipas) a poco que te den, te sabe a mucho. Hay momentos en que da la impresión de que pasaban por allí y se han juntado para hacer una película porque no tenían nada mejor que hacer e interpretan muy bien casi sin querer, les sale así y, con cuatro tablas, te montan una casa.
A pesar de todo ello, resulta un producto entretenido con un cierto regusto a los films de la época clásica del noir, sobre todo porque los diálogos contienen frases con chispa, con un fino humor de fondo que a veces te arranca una sonrisa.
Los personajes despiertan cierta simpatía porque reflejan a una especie de héroes en decadencia, con su físico ya en declive, pero que mantienen la dignidad de quienes fueron, ahora que el vigor de su cuerpo y su atractivo físico está en franco retroceso, con una Susan Sarandon que, en plena madurez, es todo un prototipo de seducción.
Debe ser difícil para un actor consagrado decidir qué guion aceptar y cual no; y más cuando ves que otros colegas ya lo han firmado.
ResponderEliminarSeguramente, aunque a veces participan en películas sin que sepas muy bien qué le vieron al guión.
EliminarCabe suponer que los productores consideraron la presencia de un Paul Newman ya entrado en años como aval suficiente para tirar adelante con la película (aunque su guion no fuese nada del otro jueves).
ResponderEliminarEl reparto protagonista, realmente es de primera.
EliminarElegante intentona para recuperar las formas y el espíritu de aquel cine negro cultivado por Hollywood en la década de los cuarenta y que dió grandes obras maestras, clásicos como EL SUEÑO ETERNO del que esta película toma algunos elementos argumentales reciclados a conveniencia. Una suave narrativa, una fotografía adecuadamente tenebrista y un reparto de carismáticos veteranos dando vida a personajes de reconocible trazado dentro del género, son las bazas que confieren atractivo a esta estimable cinta.
ResponderEliminarUn film no exento de encanto.
EliminarHola Trecce!
ResponderEliminarRecuerdo el día que la vi en el cine, que rápido pasa el tiempo... Nada que añadir a lo dicho, me estaba fijando en el paquete de Camel que sostiene Newman. Suscribo lo de Sarandon, esta impresionante...
Saludos!
Está realmente rompedora.
Eliminar