Después de obtener un éxito rotundo con su último film, el director de cine Guido Anselmi (Marcello Mastroianni), atraviesa una crisis de creatividad e intenta inútilmente hacer una nueva película. En esta situación, empieza a pasar revista a los hechos más importantes de su vida y a recordar a todas las personas que han compartido su vida y a las que quizá no supo amar.
Coproducción franco-italiana, este film, una especie de autobiografía del propio Fellini en la que expone algunas de las tribulaciones que se viven en este particular mundillo, fue premiado con dos Oscar: a la Mejor película en habla no inglesa y al Mejor vestuario.
Con una espléndida partitura de Nino Rota que incluye algunos cortes de música clásica, Fellini reflexiona sobre la presión externa que se cierne alrededor del creador artístico, no solo ante la falta de inspiración, sino ante la necesidad de que aquello que idea, alcance el nivel de obras anteriores que mantenga su prestigio.
Aunque es cierto que para algunos de quienes la vean puede resultar larga y aburrida, buena parte de los aficionados y la crítica en general, consideran este como uno de los títulos (si no el que más) de mayor calado en la carrera del realizador italiano, con escenas que se han convertido en verdaderos iconos y una influencia reconocida y reconocible en producciones posteriores de algunos grandes directores.
Qué maravilla, muchas gracias por la recomendación.
ResponderEliminarUna duda, la chica de la cuarta foto, ¿es Barbara Steel?
Gracias y feliz día.
Ella misma es.
EliminarHola Trecce!
ResponderEliminarComo dirían Hernández y Fernández en las historias de Tintín "¡Yo aun diría mas!", la película en si es un autentico icono, como esas muñecas rusas que esconden otras, toda ella en su conjunto es absolutamente fantástica e irrepetible. Tendría que comprobarlo pero me suena que esa imagen de Mastroianni se utilizo para una campaña de Cinzano, ahora no estoy seguro...
Saludos!
De cualquier forma, como tantas otras cosas de la película, esa imagen se ha convertido en un icono.
EliminarLa importancia del film, aparte de la belleza evidente de sus imágenes, radica en que, tal vez por vez primera en la historia del cine, se centra en su propia gestación, adoptando un punto de vista radicalmente subjetivo.
ResponderEliminarEs, sin duda, una de esas películas que dejan huella dentro del propio cine.
EliminarCine dentro del cine: el equivalente fílmico de las "Meninas", por así decirlo.
ResponderEliminarBuena comparación.
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