Lis (Carmen Arrufat) es una adolescente que sueña con convertirse en artista de circo y salir de su pueblo, aunque sabe que para conseguirlo tendrá que pelearlo duramente con sus padres. Es verano y Lis se pasa el día jugando en las calles del pueblo con sus amigas y tonteando con su novio, unos años mayor que ella. La falta de intimidad y el chismorreo constante de los vecinos obligan a Lis a llevar esa relación en secreto para que sus padres no se enteren. Pero ese verano idílico llega a su fin y, con el inicio del otoño, Lis descubre que está embarazada.
La debutante Lucía Alemany, realizadora y coguionista de la película, nos trae un film basado en experiencias propias, pues, salvando las distancias, se vio en una tesitura similar a la de la protagonista cuando tenía 17 años. Para ello regresa a territorio conocido, a la localidad castellonense de Traiguera, que sirve de escenario a la historia, en la que, junto a actores profesionales, interviene gente del pueblo que contribuye a subrayar el aire de espontaneidad que tiene la cinta que ya de por sí está cargada de realismo.
El conflicto que supone el paso de la infancia a la adolescencia ocupa el centro de la trama, una historia que nos han contado mil veces en el cine, entonces, ¿qué es lo que tiene de diferente esta película?
Pues varias cosas, en primer lugar la cercanía del relato, plenamente reconocible, sin trampas y sin recurrir a trucos efectistas o sentimentaloides, todo muy natural, pero sin caer en lo naif.
Además nos acerca a otras realidades, por ejemplo, la de un pueblo en el que su juventud es equiparable en modo de vida, gustos o diversiones a cualquier otra de una ciudad moderna, pero cuya sociedad parece que avanza con el freno de mano puesto hacia una total integración en el mundo actual y sus costumbres.
Retrata también la dificultad para desarrollar la personalidad y la vida en general de las mujeres en una familia marcadamente machista y el problema añadido de Lis que, además de esto, se ha ido a ennoviar con un cani que tiene toda la pinta y los hechos de un maltratador en potencia, posesivo y peligroso.
Buen trabajo de los actores veteranos (Laia Marull y Sergi López), que hacen su trabajo con arte, oficio y mucha solvencia y una protagonista, la joven Carmen Arrufat, todo un descubrimiento que logra una interpretación destacada para un papel que tiene algunas secuencias de gran dificultad y que está presente a lo largo de toda la película.
Me ha parecido una película muy interesante, educativa y pedagógica, sin pretender serlo y con muchos momentos que transitan de la dureza a lo emotivo, sin que su realizadora tenga dificultad para moverse en todos esos terrenos, incluso en los de un cierto tono de comedia.
Recomendable.
Es verdad que las interpretaciones y la historia desprenden naturalidad sin caer en lo superfluo.
ResponderEliminarSaludos.
Así me pareció a mí también.
EliminarUn saludo.