Después de unos cuantos años de haber desaparecido del viejo barrio sin dar noticias, Terry Noonan (Sean Penn) regresa. Se encuentra con su viejo amigo Jackie Flannery (Gary Oldman), hermano menor del jefe de la mafia irlandesa, Frankie (Ed Harris). Noonan no sólo era amigo en la adolescencia de Jackie sino que fue novio de su hermana Kathleen (Robin Wright), quien odia la vida de sus hermanos y se ha labrado un provenir trabajando para un lujoso hotel.
Terry le pide trabajo a Frankie e ingresa en su banda que, en esos momentos, está en negociaciones con la mafia italiana para que los "spaghetti" les permitan seguir operando en su zona, a cambio de aceptar su supremacía. Esto crea las naturales tensiones, pues los italianos pretenden imponer su ley y Frankie que está dispuesto a tragar con lo que sea con tal de conservar su cuota de poder, no logra meter en cintura del todo a los suyos, empezando por su propio hermano.
El guión está firmado por Dennis McIntyre, que había escrito algunas obras de éxito para el teatro y está basado en una banda de delincuentes que existió en la realidad: The Westies.
Aparentemente el film es una historia de gansters, una peli que podríamos encuadrar perfectamente en eso que se conoce como neo-noir. Pero tras este primer encuadre, hay bastantes más cosas, otra asunto es que el realizador consiga trasmitirlas.
Lo digo, porque, por ejemplo, la historia de amor entre Sean Penn y Robin Wright, naufraga bastante. Además hay un sugerente estudio sobre la amistad: Kathleen, su hermano Jackie y Terry, son amigos desde la infancia. El sentimiento de lealtad de uno para con los demás, sigue presente, el problema es que ellos han cambiado, han crecido, ya no son niños y hay delitos y relaciones amorosas de por medio, cosas que en la infancia no están presentes y que hacen difícil seguir manteniendo esas lealtades a toda costa, pues el deber, la ley, la moral, etc., se hacen presentes y es complicado conciliar toda esta amalgama cuyos coponentes son, algunas veces, incompatibles.
Además, plantea un hecho que fue real, la recuperación para la ciudad del centro urbano de Nueva York, donde la mafia irlandesa tenía sus cuarteles, en el barrio que desde el siglo XIX, ya se conocía en la jerga como La Cocina del Infierno, sin que se sepa muy bien de dónde venía ese apelativo (existen varias versiones), pero que ya formaba parte desde antiguo del folklore local.
Si a algunos les parece que películas como El Padrino, al menos en cierto modo, ensalzan o crean un sentido épico alrededor de la mafia, hay que señalar que aquí se ven todas las miserias de lo que debe suponer la vida en esos ambientes, al menos para personas que tengan un mínimo (por poco que sea) sentido de la honradez y la decencia.
Nos retrata a unos tipos a los que la palabra ganster les viene grande, son más bien una especie de matones venidos a más, y después de verles te queda claro que la vida que llevan, por mucho que manejen dinero, no den un palo al agua y se sientan superiores a los demás, no es nada envidiable, sino todo lo contrario.
Un cuadro de actores reconocido, con Sean Penn, Ed Harris o John Turturro, entre otros, pero con uno de ellos, Gary Oldman, que alcanza niveles interpretativos de gran nivel.
La música es del maestro Ennio Morricone, que incluye algunos cortes, muy adecuados para las escenas a las que sirven de fondo, de U-2 o de Guns N' Roses.
Película entretenida, que no obtuvo en su día mucho éxito de taquilla, aunque sí buenas críticas y que me pareció muy bien ambientada. Por cierto, el vestuario es de una clásica del cine de Hollywood, Aude Bronson-Howard (y si no que se lo digan a Robert de Niro).
Realmente, por lo menos para mi, fue una buena película. Como bien dices, probablemente paso desapercibida, pero hoy está de plena actualidad.
ResponderEliminarA pesar de ser un film correcto, a mí me sigue pareciendo que no supieron sacarle todo el partido a la historia que narra.
EliminarTrecce como apuntas quizás en su día no tuvo el éxito que se esperaba, y aunque no alcanzara en taquilla lo que los productores tampoco esperaban, creo que es una buena película. Además Sean Penn ha demostrado que es un buen actor y lo más importante que es un tío sencillo y muy humanitario.
ResponderEliminarSaludos.
Los actores, en general, están bien.
EliminarUna película que personalmente me gusto bastante además de tener buenos actores, fíjate que me supo a poco y me quede con ganas de ver más.
ResponderEliminarLa vida criminal de los Flannery y la lealtad de Terry se ve como se va peligrosamente dividida...el final aunque parece un poco pasiva es lo mejor y unas de las parte que más me gusto de la pelicula.
Saludos Trecce.
La escena final está bastante bien y acabada en su justo punto, pero a mi parecer (muy particular, claro), le sobra esa cámara lenta en el tiroteo y esa sangre saliendo a borbotones, creo que no logró bien los efectos pretendidos.
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