THIRTEEN

 

Tracy (Evan Rachel Wood), una joven de 13 años de Los Ángeles, queda fascinada por Evie (Nikki Reed), la chica más popular del instituto. Tras hacerse muy amigas, y debido a la peligrosa influencia de la "cool" Evie, la antes inocente Tracy se verá poco a poco atrapada en un trepidante ritmo de vida que nada tiene que ver con su anterior existencia sedentaria. Tracy se embarca en un mundo salvaje sobre el que no tiene control. Mientras, Mel (Holly Hunter), su madre, trata desesperadamente de comprender la radical transformación que está sufriendo su hija.

El guión, fue escrito por la propia realizadora del film, Catherine Hardwicke y por una de las protagonistas, Nikki Reed, que tenía 13 años cuando lo escribió y se basa libremente en algunas experiencias personales de esta última.

Con apariencia de videoclip en muchas de las tomas, la que intenta ser una película con una mirada diferente a la adolescencia problemática en un entorno de familia de padres divorciados sin ningún compromiso por parte del padre y con la madre superada por los acontecimientos, a la postre, se transforma en una serie de tópicos, de amiga tóxica que lleva a la otra, una niña que hasta ese momento jugaba con muñecas, a introducirse en el mundo de las drogas, el sexo y la delincuencia. Hay una mensaje subyacente a lo largo de la narración: cuidado con la libertad que puede llevar a consecuencias indeseadas. Y es que las las adolescentes que retrata son unas chicas que se mueven en la confusión entre libertad y libertinaje, egoístas y poco o nada dadas al compromiso. Eso sí, tranquilos que, al final, la sangre no llegará al río.