De cuando en cuando, se produce una marea alrededor de un asunto, de un tema o de alguna actividad, incluso de lo más variopinto, pidiendo que esa actividad sea declarada asignatura obligatoria en los estudios reglados.
Todos habréis oído y leído la insistencia de algunos sectores sobre asuntos como la religión, la cocina, la informática, la educación sexual, incluso el ajedrez o el cine, proponiendo que se conviertan en asignaturas obligatorias en el plan de estudios.
La última propuesta, que incluso ha llegado al Congreso, es la promovida por el Grupo Atresmedia, para que la educación víal se convierta en asignatura obligatoria.
Algunas de las propuestas son tan atractivas, las consideramos tan necesarias, que muchos de nosotros firmaríamos para que salieran adelante, pero el problema es que el tiempo tiene sus propias leyes y medidas, los días no dan para más de 24 horas y la edad de aprendizaje de un niño dura lo que dura y nada más.
Creo que mucha gente, en este como en muchos otros asuntos, obra de buena fe, pero en el fondo, sin que sus promotores lo pretendan hay mucha demagogia. ¿Quien se atreve a no aceptar la educación víal como asignatura obligatoria? ¿Quién a que la música no lo sea? ¿Y si proponemos una asignatura sobre reciclaje y consumo responsable? ¿Alguien diría que eso no merece que los niños lo estudien en la escuela? ¿Y qué tal convivencia y respeto a las mujeres, minorías y discapacitados?
En fin, que la lista podría ser interminable. Por eso, creo que lo mejor sería hacer como en los presupuestos del estado, quien presente una enmienda para crear una nueva partida o incrementar otra ya existente, debe indicar de dónde quitaría el dinero. Pues aquí igual, quién pretenda meter en el plan de estudios una nueva asignatura, que explique cuál es aquella que para él es una tontería y debería desaparecer ¿Quizá el inglés? ¿O tal vez las matemáticas, la lengua o la geografía?
Pues eso, que proponer temas interesantes para ser incorporados al plan de estudios, es de lo más sencillo, se me ocurren unas decenas sin pensar demasiado, pero a cambio, ¿de qué prescindimos?
Qué razón tienes Trecce. De todas formas, lo que algunos no saben es que hay algunas cosas que ya se están trabajando, como la educación en el respeto y la tolerancia o el respeto por el medio ambiente. No hace falta dedicarles una asignatura dado que ya se trabajan en todas las asignaturas que tenemos.
ResponderEliminarHay una parte de "vedetismo" por parte de algunos que reivindican estas cosas.
EliminarNo sé si hay que añadir asignaturas modernas como las que citas pero sí me parece absolutamente imprescindible el que se reinstalen las que dan a la sociedad personas minimanente FORMADAS. Y esas asignaturas son : Historia tanto nacional como Universal. Basta con preguntar a cualquier ingeniero joven sobre La Guerra de los Cien Años de franceses e ingleses, o de las Carlistadas en el XIX en España, para entender que ni putísima idea de los temas.
ResponderEliminarLo mismo sucede con Geografia, nacional y Universal. Ese ingeniero que cito es muy posible que no sepa ubicar localidades aragonesas o riojanas o levantinas en un mapa, y desde luego ni de lejos los países fronterizos de China o los Estados federales de Usa..
No estaría nada mal que en vez de gimnasia u otras actividades, los niños volvieran a tener nociones básicas de Latín para poder descifrar el significado del idioma que habla : el castellano.
El de los contenidos o programa, es otro problema, aunque relacionado con este, en el sentido de que el tiempo es limitado y si quitas cosas de aquí o allá para meter otras, el contenido de algunas asignaturas se resiente y así, me consta que los profesores de Historia Universal de 2º de bachillerato, no acaban el programa desde hace años (o lo acaban de aquella manera), por falta de horas semanales en su asignatura.
EliminarY en 2º no hay educación física, a pesar de lo cual, pues eso.