Leo (Pepón Nieto) y Rey (Carlos Fuentes) son una pareja de gays que viven en el barrio madrileño de Chueca. Son un tanto atípicos, no tienen gusto para la moda, les gusta el fútbol, no tienen un duro y están pasando por una crisis de pareja, pero dentro de lo que cabe, viven felices.
Al mismo tiempo, en el barrio se están produciendo extraños crímenes de ancianas. El asesino, Víctor (Pablo Puyol), es el dueño de una inmobiliaria cuya máxima aspiración es convertir Chueca en un barrio modelo donde todos sus habitantes sean jóvenes, modernos y guapos viviendo en casas de lujo reformadas. Para ello se dedica a asesinar a todas aquellas ancianas que no quieren venderle el piso
Víctor mata a la vecina de Leo y Rey que, sin que ellos lo supieran, había testado en favor de la pareja dejándoles el piso. Rey le regala el piso a Antonia (Concha Velasco), su madre, una mujer mayor, fumadora, desvergonzada, contestona, que odia a Leo a muerte. Víctor, al ver que el piso ha sido ocupado por una nueva anciana se dedicará a partir de ese momento a intentar deshacerse de la nueva inquilina. Pero Antonia es un hueso duro de roer.
Víctor, en su afán de conseguir el piso y de cargarse a la vieja, algo que ya se ha convertido para él en algo personal, se acercará poco a poco a Leo, seduciéndolo y engañándolo, haciendo que su ya maltrecha relación con Rey empeore aún más.
El guión se basa en la serie de comics del mismo título de Rafael Martínez Castellano, aunque en palabras del propio Rafael, la película no tiene absolutamente nada que ver con el cómic.
Es una lástima que los productores se empeñaran en hacer una película tipo "Torrente", cuando la idea de los comics, creo que da para hacer una comedia bastante más imaginativa que esta.
Aunque los protagonista son una pareja gay y se desarrolla en el barrio de Chueca, el centro de la película son los asesinatos de ancianas y la resolución de los mismos, con una cierta crítica de fondo al problema inmobiliario, así que los protagonistas podrían haber sido otros cualesquiera.
Creo que a la película le falta mucha fuerza, se va hacia lo vulgar, incluso chabacano y trillado a la hora de busca el punto humorístico y eso hace que acabe por hacer poca gracia, para colmo, la resolución final está muy poco conseguida.
Bueno, otra peli de los titiriteros y sin ningún beneficio para el arte del Cine.
ResponderEliminarCreo que tenían la oportunidad de hacer algo mejor.
EliminarEfectivamente se le podía haber sacado más partido, pero en fin otra más para los archivos del cine, aunque a veces guionistas y directores no estén a la altura.
ResponderEliminarSalud Trecce
La verdad es que no estuvieron muy inspirados.
EliminarEs una película, como dices tu, bastante chabacana y aburrida. Entra de lleno entre las películas que, aquí, en Asturias, califican de españolada
ResponderEliminarSe fueron por el lado facilón.
EliminarNunca hubiera pensando que Torrente pudiera crear un subgénero.
ResponderEliminarBueno hombre, es una manera de hablar, es la españolada de toda la vida, en tiempos, el cine de Mariano Ozores, de Pajares y Esteso...
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