Sansón (Victor Mature)es Juez de la tribu de Dan, ha sido consagrado a Dios por su madre, pues esta recibió un mensaje divino en el que le anunciaba que estaría dotado de una fuerza sobrenatural a cambio de que no se cortara el cabello.
Aunque sus padres le han comprometido para el matrimonio con Miriam (Deering Oliva), Sansón está enamorado de Semadar (Angela Lansbury), una joven que a su vez es pretendida por Ahtur (Henry Wilcoxon), capitán del ejército filisteo que ocupa los territorios danitas.
Admirado de su fuerza, el Saran de Gaza (George Sanders), le concede la mano de Semadar. Durante la fiesta de esponsales, se entabla una disputa entre Sansón y los invitados filisteos, en la reyerta posterior, Semadar muere de un lanzazo, la hermana de ésta, la hermosa Dalila (Hedy Lamarr), jura venganza contra Sansón, al que considera culpable de la muerte de su hermana.
Gran superproducción como otras de semejante factura por las que ha pasado a la posteridad Cecil B. de Mille, con ese derroche de medios técnicos y humanos que aún nos siguen asombrando en la actualidad.
Desde la sencilla historia que la Biblia nos narra en el Libro de los Jueces y que todos conocemos, el guión fabrica una narración atractiva, inventando prácticamente todo lo que cuenta salvo la esencia de la hechos, pero lo hace de una manera que el relato gana de cara al espectador.
El personaje que se lleva el verdadero protagonismo es el de Dalila, con una Hedy Lamarr esplendorosa, demostrando que, además, sabe interpretar.
Víctor Mature, el hombre, está bien, como se diría en una tarde de toros: cumple.
Evocadora banda sonora y una lograda fotografía.
Hay algunas cosas que, vistas hoy, pueden resultar un poco chocantes o incluso mover a la sonrisa, sobre todo en cuanto a decorados y efectos especiales, pero en este tipo de films nunca hemos de perder de vista la época del rodaje, sin atisbo de medios digitales que facilitan escenas como la destrucción del templo y que aquí quedan un poco falsas a pesar del esfuerzo que supuso su rodaje.
Ya he señalado que muchas de las cosas que nos cuenta están literalmente inventadas por los guionistas, entre ellas el vestuario de los filisteos y señalo este aspecto porque, como en otros de la peli, no se reparó en medios y los ropajes, sobre todo de soldados y cortesanos son espectaculares, claro que al frente tenemos a todo un mito del diseño como fue Edith Head.
Un film que, yo creo que se ve con gusto y en el que, además disfrutamos de esa belleza que fue Hedy Lamarr y de un mito de este tipo de films como Víctor Mature.
Pues fíjate que es otra de esas película que sin ser una fuera de serie, siempre la recuerdo, no sé porqué, quizás sea por Victor Mature, aunque el hombre esa tarde no cortara orejas ni rabo.
ResponderEliminarSaludos Trecce.
Para mi gusto, sus mejores escenas son los diálogos que mantiene con Lamarr cuando está está seduciéndole.
EliminarSi se ve con gusto y me trae estupendos recuerdos de los sábados por la tarde. Una buena película en la tele después de comer (cuando solo se podían ver la 1 y la 2) con una selección espectacular de películas, que ahora solo se pueden ver en dvd o en canal de pago. Una pena.
ResponderEliminar¡Qué tiempos! Tan penosos en algunas cosas, pero en otras hemos seguido el camino del cangrejo.
EliminarMe gusta la película,la he visto varias veces. Estoy de acuerdo en la espectacularidad de los ropajes y escenarios. También la pareja Hedy Lamarr y Victor Mature funcionan muy bien. Son de esas películas que no te cansas de verlas.
ResponderEliminarLo hacen bien, sí.
EliminarY la puesta en escena, como dices, deslumbrante.
Lo malo de las películas con historias bíblicas es que ya se sabe el final...o se debería saber.
ResponderEliminarNosotros conocíamos esas historias, pero quedarías sorprendido de la cantidad de gente joven que conoce las historias de la Biblia a grandes rasgos pero no tiene mucha idea de ellas.
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