Serie de relatos del famoso personaje creado por Sir Arthur Conan Doyle, como casi siempre guiados de la mano de su amigo y admirador el doctor John H. Watson.
El libro lo componen un conjunto de 13 relatos en la línea habitual de este detective aficionado.
Alguno de ellos (El constructor de Norwood), fue publicado en periódicos, antes de la salida del libro en 1905.
Doyle sacó estre libro presionado por los lectores que no aceptaban el crimen que había cometido matando a su personaje en su enfrentamiento con el profesor Moriarty en las cataratas de Reichenbach.
Los lectores pudieron felicitarse por la rectificación del escritor que, a la fuerza, eso sí, siguió deleitándonos con las aventuras del genial detective.
Hola Trece: Pues que yo creo que cuando supera el personaje al autor,debe provocar celos hasta matarlo ;^) .Lo recupera y sigue en esas aventuras que a muchos en su tiempo y ahora siguen fascinando,eso sí previo "jamacuco" de Watson al ver a Holmes reaparecer.Hombre,Holmes tenía algo que enganchaba y es que con frecuencia se negaba a ayudar a los ricos.Creo que en este libro es cuando Holmes se adentra en el mundo del deporte,con ese relato sobre rugby ¿no es así?,yo creo que sí.
ResponderEliminarAquí tenemos a Pepe Carvalho de Vázquez Montalbán que a mi me encanta,sobre todo por su saber culinario ;^),bueno,entre más cosas
Saludos Trece.
Hay personajes que dejan huella y éste es uno de ellos, aunque personalmente tengo preferencia por Miss Marple y Poirot, además del extravagante Nero Wolfe y su ayudante Archie.
ResponderEliminarSaludos.
Algo tendrá, Claudia, cuando en nuestros días seguimos hablando de él como de algo actual.
ResponderEliminarA mí, cada uno con sus peculiaridades, me gustan los que has nombrado y alguno más, Maribel, pero hay que reconocer que Holmes es mucho Holmes, sin desmerecer en nada al resto que, para mucha gente, pueden ser incluso más atractivos.
ResponderEliminarHola Trecce.
ResponderEliminarLa parte final del constructor de Norwood es como consiguió saber que el tipo estaba en la casa de la forma más simple y sencilla pero inteligente mente.
Oir la alarma de fuego lo delato rápidamente, de tal modo que se descubrió el mismo.
Un estupendo capitulo sin demerecer los demás.
Saludos cordiales Trecce.
Todos son muy entretenidos, E.P. Un saludo.
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